Thursday, November 20, 2003
Impro
He estado muy ausente del blog en la ultima semana por las razones de trabajo que ya les expliqué. Es malo por un lado porque hay muchas noticias que he querido comentar pero no me ha sido posible, como por ejemplo los premios de Grandes Ligas (aunque en cierto modo en los casos de MVP hay algunas cosas), algunos cambios que se han producido de cierta importancia, como el de A.J. Pyerzinski a los Gigantes, el de ted Lilly a Toronto por Bobby Kielty y el propuesto entre Oakland y San Diego que envuelve a Ramón Hernandez, Mark Kotsay y Terrence Long. Otra cosa es la firma de Raul Ibáñez por los Marineros, el primer acto de gobierno del nuevo Gerente General Bill Bavasi, que la verdad hace sospechar que los Marineros podrían volverse muy malos muy pronto.
Por el otro lado, quizas más importante, está el béisbol local, del cual hace rato que no hablamos nada, desde que dedicamos un momento a analizar la ofensiva del Escogido. Obviamente algunas cosas han pasado desde entonces, y sin un orden especifico, improviso algunas ideas de todo para tratar de ponernos al día.
Here we go...
De vuelta a la normalidad
Bastante poco que duró la tragedia en el Cibao con el mal inicio de las Águilas. Todo ha vuelto a la normalidad, gracias. Lo sorprendente del caso es que el núcleo de los principales jugadores de las Aguilas no están produciendo ofensivamente, y a pesar de eso, están como quiera en primer lugar. El pitcheo abridor ha estado bastante estable con Doug Linton, Juan F. Peña, y Mitch Walk lanzando bien, y en el relevo el grupo de José Vargas, Carl Sadler, Brian McNichol y Ed Almonte han logrado mantener el barco a flote hasta que inicie la integración de los Arnaldo Muñoz y compañía.
Para ayudar la ofensiva las Aguilas han traído de nuevo a Antón French, una importación muy curiosa porque French fue dado de baja en la liga de México por el club Navojoa, y no son comunes los casos en los que algún equipo Dominicano adquiera talento dado de baja en las otras ligas inferiores a esta. Pero las Aguilas son una fuerza de la naturaleza a la que todo le sale bien, y por supuesto French conectó tres hits en su primer juego. French es la clase de jugador que las Aguilas buscan y le sacan provecho, y no hay por que pensar que ocurra lo contrario en este caso.
Uno que ha estado muy bien – de los pocos ofensivamente – es Alexis Gómez. Gómez bateaba .319/ .396/ .511 sin incluir el juego de anoche en San Pedro de Macorís (donde también le fue muy bien) y por el momento ha sido el jugador ofensivo más importante para las Aguilas. El status de Gómez como prospecto ha descendido en los últimos dos años, de modo que un buen desempeño en esta liga le haría muy bien para recuperar el lustre perdido.
En la lupa : El Elefante
A propósito del juego de anoche, las Estrellas volvieron a sufrir otra derrota lamentable, otra vez por una carrera, y ya la preocupación que yo había minimizado a principios de la semana pasada, me parece enteramente justificada.
El equipo definitivamente no luce bien. La ofensiva es completamente disfuncional y apenas en un solo juego (el 8 a 1 en Santiago) es que la producción ha parecido fluir de buena forma. En los primeros dos turnos el equipo ha tenido mayormente una combinación de Freddy Guzman, Pablo Ozuna y Victor Mercedes. El porcentaje de embasarse de Guzman y Ozuna es de .313 y .250 respectivamente, lo cual es por supuesto horrible. Mercedes tiene un OBP en .471, pero ha tenido que ceder tiempo de juego al más experimentado Ozuna, y de igual manera eso lo ha conseguido en apenas 13 turnos, lo cual es una muestra poco representativa.
Quiere decir entonces que primer y segundo bate se embasan menos del 30% de las veces, y así no hay forma posible de producir carreras. Por eso es que Abraham Nuñez tiene cuatro jonrones y cuatro empujadas, independientemente de cómo este bateando con gente en base, información que nadie sabe a ciencia cierta porque las estadísticas “sofisticadas” parece que no les interesan a la liga ni los equipos, quienes sobreviven muy bien con un obsoleto e ineficiente sistema de información para manejar los “numeritos”.
Pero volviendo a lo nuestro, y perdón por la digresión, el resto de los hombres que pudieran batear en los primeros turnos serían Wilton Guerrero (.278 OBP) y Wilken Ruan (.154 OBP), lo que quiere decir que las Estrellas necesitan urgentemente que Ozuna retome su forma de ser un bateador de .300 en la liga (aunque con OBPs no muy altos) para que la punta del lineup pueda empezar a ser eficiente.
En cuanto a los refuerzos, J.D. Closser, quien había sido el mejor bateador del equipo hasta hace dos ó tres días, ha entrado en un feo slump que ha visto descender sus números considerablemente. El otro refuerzo, Koyie Hill, antes de su jonrón de ayer bateaba .105 en 19 turnos. Si recuerdan el articulo de los refuerzos en él dijimos que Hill era un bateador muy proclive a entrar en rachas, positivas y negativas, y puede que a las Estrellas les haya tocado en principio la parte fea de Hill.
Otro inconveniente de las Estrellas es la tercera base. La gerencia confió en que la posición la podía cubrir el jovencito Robinson Canó, inclinados posiblemente por su actuación del año pasado - que vista a la distancia es bueno recordar que en el Round Robin, ante una oposición más avanzada, Canó solo bateó .235/ .316/ .373 - Canó no ha podido llenar las expectativas hasta ahora, apenas un hit en 19 turnos, y eso ha originado una puerta rotatoria en la posición con Napoleón Calzado (.200), Junior Zamora (.000), Canó y en ocasiones Wilton Guerrero. Eso es una producción inaceptable para una posición importante de las esquinas del terreno y es casi de urgencia resolver el problema alrededor de ella.
El pitcheo abridor, hasta ahora el punto más destacable del club, puede tener problemas de profundidad por la salida de José Mercedes y la ausencia prolongada de Luis De los Santos. Denny Bautista no tiró bien en su salida en La Romana y las dudas sobre la efectividad de Masato Yoshii empiezan a acumularse. Ahora mismo Esteban Yan y Martín Vargas son los hombres que cargan la rotación, y por el momento en términos de pitcheo abridor no hay ayuda cercana a la vista.
La estrategia de importar lanzadores veteranos del Oriente cobró sus primeras dos victimas en Brian Mallette y Takahito Nomura, ambos ya fuera del equipo, quienes no pudieron hacer el trabajo por problemas en sus brazos. Nomura no pudo siquiera tirar una en casi dos semanas que duró en el país “poniéndose en forma” y el lugar suyo y el de Mallette en el bullpen ahora mismo están vacantes, lo cual significa menos profundidad, y lo cual significa derrotas como la de anoche ante las Aguilas.
Las Estrellas anunciaron la contratación de Tim Christman, un lanzador zurdo quien viene de las Ligas Independientes, y al cual por supuesto hay que esperar a verlo lanzar para hacerse un juicio más acabado sobre su eventual utilidad.
El equipo se tomó un gran riesgo con un posible alto retorno al contratar cuatro lanzadores de este tipo, pero lamentablemente la estrategia no ha dado resultados. Una ultima cosa por ver es si la gerencia decide utilizar la otra vacante de importado y traer a un jugador ofensivo, preferiblemente una tercera base, dado que con la integración de Jesús Colomé y posiblemente Dámaso Marte, el relevo adquiere un poco de profundidad.
Las Estrellas han agotado ya casi el 30% de su calendario, por lo que afirmar que “todavía es temprano” no es enteramente correcto, más aun cuando la distancia que les separa de la clasificación es de tres juegos.
Lo primero es ver como se arregla la ofensiva, si los tres jugadores criollos claves del club - FelixJosé, Ozuna y Nuñez – empiezan a producir la ofensiva no hay dudas va a mejorar. El equipo necesita de estos tres más los dos importados, porque el resto del cuerpo de reparto no ha logrado producir hasta ahora.
Esperar y ver.
Por el otro lado, quizas más importante, está el béisbol local, del cual hace rato que no hablamos nada, desde que dedicamos un momento a analizar la ofensiva del Escogido. Obviamente algunas cosas han pasado desde entonces, y sin un orden especifico, improviso algunas ideas de todo para tratar de ponernos al día.
Here we go...
De vuelta a la normalidad
Bastante poco que duró la tragedia en el Cibao con el mal inicio de las Águilas. Todo ha vuelto a la normalidad, gracias. Lo sorprendente del caso es que el núcleo de los principales jugadores de las Aguilas no están produciendo ofensivamente, y a pesar de eso, están como quiera en primer lugar. El pitcheo abridor ha estado bastante estable con Doug Linton, Juan F. Peña, y Mitch Walk lanzando bien, y en el relevo el grupo de José Vargas, Carl Sadler, Brian McNichol y Ed Almonte han logrado mantener el barco a flote hasta que inicie la integración de los Arnaldo Muñoz y compañía.
Para ayudar la ofensiva las Aguilas han traído de nuevo a Antón French, una importación muy curiosa porque French fue dado de baja en la liga de México por el club Navojoa, y no son comunes los casos en los que algún equipo Dominicano adquiera talento dado de baja en las otras ligas inferiores a esta. Pero las Aguilas son una fuerza de la naturaleza a la que todo le sale bien, y por supuesto French conectó tres hits en su primer juego. French es la clase de jugador que las Aguilas buscan y le sacan provecho, y no hay por que pensar que ocurra lo contrario en este caso.
Uno que ha estado muy bien – de los pocos ofensivamente – es Alexis Gómez. Gómez bateaba .319/ .396/ .511 sin incluir el juego de anoche en San Pedro de Macorís (donde también le fue muy bien) y por el momento ha sido el jugador ofensivo más importante para las Aguilas. El status de Gómez como prospecto ha descendido en los últimos dos años, de modo que un buen desempeño en esta liga le haría muy bien para recuperar el lustre perdido.
En la lupa : El Elefante
A propósito del juego de anoche, las Estrellas volvieron a sufrir otra derrota lamentable, otra vez por una carrera, y ya la preocupación que yo había minimizado a principios de la semana pasada, me parece enteramente justificada.
El equipo definitivamente no luce bien. La ofensiva es completamente disfuncional y apenas en un solo juego (el 8 a 1 en Santiago) es que la producción ha parecido fluir de buena forma. En los primeros dos turnos el equipo ha tenido mayormente una combinación de Freddy Guzman, Pablo Ozuna y Victor Mercedes. El porcentaje de embasarse de Guzman y Ozuna es de .313 y .250 respectivamente, lo cual es por supuesto horrible. Mercedes tiene un OBP en .471, pero ha tenido que ceder tiempo de juego al más experimentado Ozuna, y de igual manera eso lo ha conseguido en apenas 13 turnos, lo cual es una muestra poco representativa.
Quiere decir entonces que primer y segundo bate se embasan menos del 30% de las veces, y así no hay forma posible de producir carreras. Por eso es que Abraham Nuñez tiene cuatro jonrones y cuatro empujadas, independientemente de cómo este bateando con gente en base, información que nadie sabe a ciencia cierta porque las estadísticas “sofisticadas” parece que no les interesan a la liga ni los equipos, quienes sobreviven muy bien con un obsoleto e ineficiente sistema de información para manejar los “numeritos”.
Pero volviendo a lo nuestro, y perdón por la digresión, el resto de los hombres que pudieran batear en los primeros turnos serían Wilton Guerrero (.278 OBP) y Wilken Ruan (.154 OBP), lo que quiere decir que las Estrellas necesitan urgentemente que Ozuna retome su forma de ser un bateador de .300 en la liga (aunque con OBPs no muy altos) para que la punta del lineup pueda empezar a ser eficiente.
En cuanto a los refuerzos, J.D. Closser, quien había sido el mejor bateador del equipo hasta hace dos ó tres días, ha entrado en un feo slump que ha visto descender sus números considerablemente. El otro refuerzo, Koyie Hill, antes de su jonrón de ayer bateaba .105 en 19 turnos. Si recuerdan el articulo de los refuerzos en él dijimos que Hill era un bateador muy proclive a entrar en rachas, positivas y negativas, y puede que a las Estrellas les haya tocado en principio la parte fea de Hill.
Otro inconveniente de las Estrellas es la tercera base. La gerencia confió en que la posición la podía cubrir el jovencito Robinson Canó, inclinados posiblemente por su actuación del año pasado - que vista a la distancia es bueno recordar que en el Round Robin, ante una oposición más avanzada, Canó solo bateó .235/ .316/ .373 - Canó no ha podido llenar las expectativas hasta ahora, apenas un hit en 19 turnos, y eso ha originado una puerta rotatoria en la posición con Napoleón Calzado (.200), Junior Zamora (.000), Canó y en ocasiones Wilton Guerrero. Eso es una producción inaceptable para una posición importante de las esquinas del terreno y es casi de urgencia resolver el problema alrededor de ella.
El pitcheo abridor, hasta ahora el punto más destacable del club, puede tener problemas de profundidad por la salida de José Mercedes y la ausencia prolongada de Luis De los Santos. Denny Bautista no tiró bien en su salida en La Romana y las dudas sobre la efectividad de Masato Yoshii empiezan a acumularse. Ahora mismo Esteban Yan y Martín Vargas son los hombres que cargan la rotación, y por el momento en términos de pitcheo abridor no hay ayuda cercana a la vista.
La estrategia de importar lanzadores veteranos del Oriente cobró sus primeras dos victimas en Brian Mallette y Takahito Nomura, ambos ya fuera del equipo, quienes no pudieron hacer el trabajo por problemas en sus brazos. Nomura no pudo siquiera tirar una en casi dos semanas que duró en el país “poniéndose en forma” y el lugar suyo y el de Mallette en el bullpen ahora mismo están vacantes, lo cual significa menos profundidad, y lo cual significa derrotas como la de anoche ante las Aguilas.
Las Estrellas anunciaron la contratación de Tim Christman, un lanzador zurdo quien viene de las Ligas Independientes, y al cual por supuesto hay que esperar a verlo lanzar para hacerse un juicio más acabado sobre su eventual utilidad.
El equipo se tomó un gran riesgo con un posible alto retorno al contratar cuatro lanzadores de este tipo, pero lamentablemente la estrategia no ha dado resultados. Una ultima cosa por ver es si la gerencia decide utilizar la otra vacante de importado y traer a un jugador ofensivo, preferiblemente una tercera base, dado que con la integración de Jesús Colomé y posiblemente Dámaso Marte, el relevo adquiere un poco de profundidad.
Las Estrellas han agotado ya casi el 30% de su calendario, por lo que afirmar que “todavía es temprano” no es enteramente correcto, más aun cuando la distancia que les separa de la clasificación es de tres juegos.
Lo primero es ver como se arregla la ofensiva, si los tres jugadores criollos claves del club - FelixJosé, Ozuna y Nuñez – empiezan a producir la ofensiva no hay dudas va a mejorar. El equipo necesita de estos tres más los dos importados, porque el resto del cuerpo de reparto no ha logrado producir hasta ahora.
Esperar y ver.
Otra vez la pregunta, ¿qué hay tras un número?
Tal y como esperaba la eleccion de Barry Bonds sobre Albert Pujols – y de forma abrumadora, nada menos – ha provocado todo tipo de reacciones de parte de muchas personas que consideran una gran injusticia el haberle “robado” el premio al joven slugger Dominicano. Aparentemente muchos piensan que los votantes de la Liga Nacional se inclinaron por premiar al hombre del equipo que ganó pero (según ellos) con numeros inferiores, ignorando al hombre del equipo que no ganó, pero con numeros (según ellos tambien) infinitamente superiores. Me gustaría saber cual era la opinión de estos amigos el año pasado cuando Miguel Tejada “ganó” el premio sobre un significativamente superior Alex Rodríguez.
Dos ejemplos de estos puntos de vista son el de Sammy Sosa a su llegada al pais , y el otro es el del amigo Juan José Rodríguez en su columna Zona Deportiva el jueves .
Particularmente la opinión de Juan José, la cual yo respeto, pero no comparto en lo absoluto, me ha motivado a republicar un articulo que aparecio en los inicios del blog - creo que en los primeros días de septiembre - en donde trato más ó menos de explicar y orientar acerca del verdadero significado de las estadisticas en béisbol. Particularmente el objetivo era el de plantar en la idea del lector que hace tiempo que se están desarrollando metodos de analisis mucho más complejos y mucho más efectivos y exactos para evaluar correctamente el desempeño ofensivo.
Con todo respeto, el limitar el argumento acerca del valor de un jugador sobre otro a los numeritos tradicionales, es sumamente limitado y no llevará a una respuesta correcta casi nunca. Es lo mismo que ignorar el contexto en donde se produce esa labor ofensiva, lo cual casi nunca es tomado en cuenta en los analisis tradicionales. En el caso de Bonds y Pujols, por ejemplo, Bonds juega la mitad de sus partidos en un estadio que reduce la ofensiva considerablemente, pero yo no veo que nadie mencione nunca esa parte. Incluso he visto a personas decir que a Bonds le favorece el Pac Bell (SBC) Park porque dizque la verja del rightfield esta cerca. Haga memoria y piense a cuantos bateadores zurdos, aparte de Barry Bonds, ha visto usted sacarla por el jardin derecho y llevar la pelota a la ensenada de McCovey.
En fín, adjunto está lo que pensaba en septiembre acerca de esta controversia, los numeros no me parece necesario actualizarlos porque no variaron mucho, sobre todos los numeros de valor relativo, ó más complejos que son los importantes.
Aclaro que no estoy buscando rebatir la opinión de nadie por rebatirla, simplemente ofrecer una opinión distinta, y que considero un poco más profunda sobre el tema.
__________________________________________________________________________________________
Una de las grandes complicaciones de ser comentarista de deportes en nuestro país, y en particular analista de béisbol, es que en ocasiones uno tiene que privarse de decir las cosas todo lo descarnadamente claras que son. Es difícil criticar - ó más que criticar, analizar - objetivamente las fortalezas y debilidades de un pelotero Dominicano porque uno nunca sabe en que momento se lo va a encontrar en el terreno de juego en el invierno (o lo que es peor, tener que solicitarle una entrevista) o si alguien que escuche ó lea el comentario no va a entender completamente la idea que se quiere transmitir, e infiera penosamente que es que uno no quiere saber de fulano, ó te cae mal, ó eres anti-dominicano ó le tienes mala gana a los peloteros de las Águilas ó del Escogido.
Este fenómeno se exacerba de forma más notoria cuando nos toca la suerte de que alguno de nuestros jugadores (ó managers y ejecutivos) tenga un desempeño tan sobresaliente que merezca ser considerado para optar por uno de los premios grandes que cada año otorga la Asociación de Escritores de Béisbol de América. Es en estos casos en donde se pone a prueba la objetividad de todos como analistas, e incluso el compromiso con nuestras convicciones ó entendimiento acerca del juego – escuelas de pensamiento, como a mí me gusta llamarle – y es en estos casos en donde penosamente optamos por hacernos los agradables y no los objetivos. El caso de los fanáticos es distinto. Por ser precisamente lo que son, no se puede pedir objetividad y falta de pasión en sus creencias.
El caso se está produciendo en estos días con Albert Pujols y su lucha por el premio a Jugador Mas Valioso con Barry Bonds. No vamos a perder el tiempo reiterando lo obvio sobre la temporada extraordinaria en términos ofensivos de Albert, y lo propio con relación a Barry Bonds. Lo que me produce mucha pena, y de paso me niego a aceptar, es que en nuestras simpatías obvias por Albert caigamos en la falsedad de afirmar que él merece mucho más el premio que Bonds, y peor aun, que seria injusto otorgárselo al jugador de los Gigantes. Es lo contrario amigos míos, y perdón por no tomar una posición que nos agrade a todos. Según como yo lo veo, la única ventaja de Pujols sobre Bonds, ofensivamente (no menciono el juego defensivo puesto que en ningún caso su aporte es importante) es que Albert ha estado en el lineup mas regularmente, algo que sin dudas tiene valor.
El argumento a favor de Albert es su presencia importante en casi todos los principales renglones ofensivos de la Liga Nacional, a saber:
Barry Bonds por su lado “apenas” aparece entre los primeros diez en solo seis departamentos: Bateo (3ro), Anotadas (7mo) y de líder en cuadrangulares, slugging, porcentaje de embasarse y bases por bolas recibidas.
Preguntaran ustedes ¿Cómo diablos se va a creer nadie que Bonds ha tenido mejor temporada cuando los números parecen estar bien claros? Bueno, la respuesta esta precisamente en la pregunta ¿Qué hay tras un numero? Dice un adagio que las estadísticas las utilizamos a veces como un borracho a un poste de luz: para apoyarse en vez de que le arroje luz. En este caso, estamos usando las estadísticas igual que el borracho, para apoyar nuestra posición, pero lamentablemente sin utilizar todo el rigor científico.
Gracias a la inteligencia de mucha gente hace ya casi dos décadas que se ha establecido con bastante claridad como funciona la ofensiva en el juego de béisbol, colectiva e individualmente. Al analizar el desempeño ofensivo siempre hay que partir de una premisa fundamental: La gran diferencia en un juego de béisbol consiste en estar en las bases (embasado) ó no, el resto es trivial. El corolario a este razonamiento es que los outs son igualmente importantes porque significan ausencia de corredores en las bases, ó lo que es lo mismo, menos probabilidad de anotar carreras.
Con Albert y Barry se está confundiendo diversidad ofensiva con valor ofensivo. Bill James dice en uno de sus libros que el trabajo de un bateador no es pararse en el home a conectar un sencillo, un doble, un homerun, a recibir una bases por bolas ó a avanzar un corredor; el trabajo de un bateador es ayudar a crear carreras para su equipo. Nadie, absolutamente nadie en las Grandes Ligas – ó en ninguna liga – es más eficiente que Barry Bonds en ese aspecto. Albert aparece en muchos encasillados ofensivos, Barry encabeza – por mucho – los más importantes.
Usando herramientas de evaluación no tradicionales la realidad es la siguiente:
Bastaría con mirar los primeros dos encasillados para darse cuenta la diferencia. Bonds aventaja a Pujols por 87 (.087, para ser correctos) puntos en el fundamental renglón de porcentaje de embasarse, que sería la misma diferencia entre el OBP de Sammy Sosa y el de Neifi Perez.. En slugging la ventaja es de 68 puntos. En los demás renglones poco conocidos me permito explicar brevemente el significado de cada uno:
EqA ó Average Equivalente: Método desarrollado por Baseball Prospectus para medir el valor ofensivo de un jugador. El average equivalente es ajustado, es decir, considera el estadio y como este favorece ó no la ofensiva. El average equivalente viene dado en un formato similar al del promedio de bateo para hacer una referencia más rápida. Un EqA de .300 es bueno, uno de .240 no.
VORP ó Valor sobre un jugador de reemplazo: Igual desarrollado por Baseball Prospectus, es el valor por encima, estimado en carreras, que un jugador tiene sobre un jugador de reemplazo. El VORP toma en cuenta defensa y corrido de bases en su calculo. El termino jugador de reemplazo se aplica a aquel que es la alternativa mínima con que se puede sustituir un jugador regular. El jugador con nivel de reemplazo no se debe confundir con el jugador promedio, su valor es mucho menor al del promedio. Bonds y Pujols valen 100 y 88 carreras más que un nivel de reemplazo, lo cual representa once y un poco menos de diez victorias en el standing.
RAP ó Carreras por encima de un reemplazo de su posición: También de BP, y al igual que el VORP se mide en carreras. El RAP representa básicamente lo mismo que el VORP, solo que tomando en cuenta la posición del jugador. Es decir, Bonds y Pujols son comparados con todos los leftfielders y un leftfielder nivel de reemplazo, de igual manera Alex Rodríguez se compara solo con los shortstops. Otra diferencia es que RAP solo toma en cuenta ofensiva y no defensiva.
Win Shares ó Cuotas de Victorias: El ultimo método desarrollado por Bill James. Win Shares intenta representar en un solo numero entero el aporte total de un jugador a las victorias de su equipo. Una cuota de victoria representa una tercera parte de un juego ganado del equipo. Lo que significa que un pelotero con 30 win shares es más ó menos responsable, por sí solo, de diez victorias de su equipo. Fijense que es muy cercano el valor al de VORP.
Explicada toda esta parafernalia vemos que Bonds aventaja a Pujols en cinco de seis mediciones ya más sofisticadas, que toman en cuenta una diversidad de factores. Es preciso notar que Pujols se acerca, e incluso aventaja a Bonds, en mediciones acumulativas (win shares, por ejemplo) en donde el tiempo de juego se toma en cuenta y Pujols ha jugado en 26 juegos más que Bonds.
Ese es el panorama mis amigos. La lucha es cerrada por el simple hecho de que Albert ha estado presente en el lineup con mas frecuencia que Bonds. Y yo reitero que eso es importante, porque los Gigantes sin Bonds se convierten en un equipo ofensivo menos que ordinario, y eso los afecta a la hora de ganar partidos. Ese es el argumento más poderoso para los que apoyan la candidatura de Pujols, lo otro – los numeritos – no resisten un análisis más profundo.
Albert está teniendo una temporada ofensiva histórica, lamentablemente para él, es la segunda mejor del 2003. Eso no es un crimen, considerando que su competidor tiene tres temporadas consecutivas solamente comparables a temporadas de Babe Ruth. Es difícil competir contra esa realidad.
Dos ejemplos de estos puntos de vista son el de Sammy Sosa a su llegada al pais , y el otro es el del amigo Juan José Rodríguez en su columna Zona Deportiva el jueves .
Particularmente la opinión de Juan José, la cual yo respeto, pero no comparto en lo absoluto, me ha motivado a republicar un articulo que aparecio en los inicios del blog - creo que en los primeros días de septiembre - en donde trato más ó menos de explicar y orientar acerca del verdadero significado de las estadisticas en béisbol. Particularmente el objetivo era el de plantar en la idea del lector que hace tiempo que se están desarrollando metodos de analisis mucho más complejos y mucho más efectivos y exactos para evaluar correctamente el desempeño ofensivo.
Con todo respeto, el limitar el argumento acerca del valor de un jugador sobre otro a los numeritos tradicionales, es sumamente limitado y no llevará a una respuesta correcta casi nunca. Es lo mismo que ignorar el contexto en donde se produce esa labor ofensiva, lo cual casi nunca es tomado en cuenta en los analisis tradicionales. En el caso de Bonds y Pujols, por ejemplo, Bonds juega la mitad de sus partidos en un estadio que reduce la ofensiva considerablemente, pero yo no veo que nadie mencione nunca esa parte. Incluso he visto a personas decir que a Bonds le favorece el Pac Bell (SBC) Park porque dizque la verja del rightfield esta cerca. Haga memoria y piense a cuantos bateadores zurdos, aparte de Barry Bonds, ha visto usted sacarla por el jardin derecho y llevar la pelota a la ensenada de McCovey.
En fín, adjunto está lo que pensaba en septiembre acerca de esta controversia, los numeros no me parece necesario actualizarlos porque no variaron mucho, sobre todos los numeros de valor relativo, ó más complejos que son los importantes.
Aclaro que no estoy buscando rebatir la opinión de nadie por rebatirla, simplemente ofrecer una opinión distinta, y que considero un poco más profunda sobre el tema.
__________________________________________________________________________________________
Una de las grandes complicaciones de ser comentarista de deportes en nuestro país, y en particular analista de béisbol, es que en ocasiones uno tiene que privarse de decir las cosas todo lo descarnadamente claras que son. Es difícil criticar - ó más que criticar, analizar - objetivamente las fortalezas y debilidades de un pelotero Dominicano porque uno nunca sabe en que momento se lo va a encontrar en el terreno de juego en el invierno (o lo que es peor, tener que solicitarle una entrevista) o si alguien que escuche ó lea el comentario no va a entender completamente la idea que se quiere transmitir, e infiera penosamente que es que uno no quiere saber de fulano, ó te cae mal, ó eres anti-dominicano ó le tienes mala gana a los peloteros de las Águilas ó del Escogido.
Este fenómeno se exacerba de forma más notoria cuando nos toca la suerte de que alguno de nuestros jugadores (ó managers y ejecutivos) tenga un desempeño tan sobresaliente que merezca ser considerado para optar por uno de los premios grandes que cada año otorga la Asociación de Escritores de Béisbol de América. Es en estos casos en donde se pone a prueba la objetividad de todos como analistas, e incluso el compromiso con nuestras convicciones ó entendimiento acerca del juego – escuelas de pensamiento, como a mí me gusta llamarle – y es en estos casos en donde penosamente optamos por hacernos los agradables y no los objetivos. El caso de los fanáticos es distinto. Por ser precisamente lo que son, no se puede pedir objetividad y falta de pasión en sus creencias.
El caso se está produciendo en estos días con Albert Pujols y su lucha por el premio a Jugador Mas Valioso con Barry Bonds. No vamos a perder el tiempo reiterando lo obvio sobre la temporada extraordinaria en términos ofensivos de Albert, y lo propio con relación a Barry Bonds. Lo que me produce mucha pena, y de paso me niego a aceptar, es que en nuestras simpatías obvias por Albert caigamos en la falsedad de afirmar que él merece mucho más el premio que Bonds, y peor aun, que seria injusto otorgárselo al jugador de los Gigantes. Es lo contrario amigos míos, y perdón por no tomar una posición que nos agrade a todos. Según como yo lo veo, la única ventaja de Pujols sobre Bonds, ofensivamente (no menciono el juego defensivo puesto que en ningún caso su aporte es importante) es que Albert ha estado en el lineup mas regularmente, algo que sin dudas tiene valor.
El argumento a favor de Albert es su presencia importante en casi todos los principales renglones ofensivos de la Liga Nacional, a saber:
| Renglon | Total | Posicion |
|---|---|---|
| Promedio | .365 | 1 |
| HR | 39 | 2 |
| RBI | 118 | 2 |
| SLG | .679 | 2 |
| OBP | .442 | 3 |
| Anotadas | 124 | 1 |
| Hits | 190 | 1 |
| 2B | 45 | 2 |
| Total Bases | 354 | 1 |
Barry Bonds por su lado “apenas” aparece entre los primeros diez en solo seis departamentos: Bateo (3ro), Anotadas (7mo) y de líder en cuadrangulares, slugging, porcentaje de embasarse y bases por bolas recibidas.
Preguntaran ustedes ¿Cómo diablos se va a creer nadie que Bonds ha tenido mejor temporada cuando los números parecen estar bien claros? Bueno, la respuesta esta precisamente en la pregunta ¿Qué hay tras un numero? Dice un adagio que las estadísticas las utilizamos a veces como un borracho a un poste de luz: para apoyarse en vez de que le arroje luz. En este caso, estamos usando las estadísticas igual que el borracho, para apoyar nuestra posición, pero lamentablemente sin utilizar todo el rigor científico.
Gracias a la inteligencia de mucha gente hace ya casi dos décadas que se ha establecido con bastante claridad como funciona la ofensiva en el juego de béisbol, colectiva e individualmente. Al analizar el desempeño ofensivo siempre hay que partir de una premisa fundamental: La gran diferencia en un juego de béisbol consiste en estar en las bases (embasado) ó no, el resto es trivial. El corolario a este razonamiento es que los outs son igualmente importantes porque significan ausencia de corredores en las bases, ó lo que es lo mismo, menos probabilidad de anotar carreras.
Con Albert y Barry se está confundiendo diversidad ofensiva con valor ofensivo. Bill James dice en uno de sus libros que el trabajo de un bateador no es pararse en el home a conectar un sencillo, un doble, un homerun, a recibir una bases por bolas ó a avanzar un corredor; el trabajo de un bateador es ayudar a crear carreras para su equipo. Nadie, absolutamente nadie en las Grandes Ligas – ó en ninguna liga – es más eficiente que Barry Bonds en ese aspecto. Albert aparece en muchos encasillados ofensivos, Barry encabeza – por mucho – los más importantes.
Usando herramientas de evaluación no tradicionales la realidad es la siguiente:
| Renglon | Bonds | Pujols |
|---|---|---|
| OBP | .529 | .442 |
| SLG | .747 | .679 |
| EqA | .421 | .366 |
| VORP | 100.7 | 88.8 |
| RAP | 81.8 | 63.4 |
| Win Shares | 36 | 38 |
Bastaría con mirar los primeros dos encasillados para darse cuenta la diferencia. Bonds aventaja a Pujols por 87 (.087, para ser correctos) puntos en el fundamental renglón de porcentaje de embasarse, que sería la misma diferencia entre el OBP de Sammy Sosa y el de Neifi Perez.. En slugging la ventaja es de 68 puntos. En los demás renglones poco conocidos me permito explicar brevemente el significado de cada uno:
EqA ó Average Equivalente: Método desarrollado por Baseball Prospectus para medir el valor ofensivo de un jugador. El average equivalente es ajustado, es decir, considera el estadio y como este favorece ó no la ofensiva. El average equivalente viene dado en un formato similar al del promedio de bateo para hacer una referencia más rápida. Un EqA de .300 es bueno, uno de .240 no.
VORP ó Valor sobre un jugador de reemplazo: Igual desarrollado por Baseball Prospectus, es el valor por encima, estimado en carreras, que un jugador tiene sobre un jugador de reemplazo. El VORP toma en cuenta defensa y corrido de bases en su calculo. El termino jugador de reemplazo se aplica a aquel que es la alternativa mínima con que se puede sustituir un jugador regular. El jugador con nivel de reemplazo no se debe confundir con el jugador promedio, su valor es mucho menor al del promedio. Bonds y Pujols valen 100 y 88 carreras más que un nivel de reemplazo, lo cual representa once y un poco menos de diez victorias en el standing.
RAP ó Carreras por encima de un reemplazo de su posición: También de BP, y al igual que el VORP se mide en carreras. El RAP representa básicamente lo mismo que el VORP, solo que tomando en cuenta la posición del jugador. Es decir, Bonds y Pujols son comparados con todos los leftfielders y un leftfielder nivel de reemplazo, de igual manera Alex Rodríguez se compara solo con los shortstops. Otra diferencia es que RAP solo toma en cuenta ofensiva y no defensiva.
Win Shares ó Cuotas de Victorias: El ultimo método desarrollado por Bill James. Win Shares intenta representar en un solo numero entero el aporte total de un jugador a las victorias de su equipo. Una cuota de victoria representa una tercera parte de un juego ganado del equipo. Lo que significa que un pelotero con 30 win shares es más ó menos responsable, por sí solo, de diez victorias de su equipo. Fijense que es muy cercano el valor al de VORP.
Explicada toda esta parafernalia vemos que Bonds aventaja a Pujols en cinco de seis mediciones ya más sofisticadas, que toman en cuenta una diversidad de factores. Es preciso notar que Pujols se acerca, e incluso aventaja a Bonds, en mediciones acumulativas (win shares, por ejemplo) en donde el tiempo de juego se toma en cuenta y Pujols ha jugado en 26 juegos más que Bonds.
Ese es el panorama mis amigos. La lucha es cerrada por el simple hecho de que Albert ha estado presente en el lineup con mas frecuencia que Bonds. Y yo reitero que eso es importante, porque los Gigantes sin Bonds se convierten en un equipo ofensivo menos que ordinario, y eso los afecta a la hora de ganar partidos. Ese es el argumento más poderoso para los que apoyan la candidatura de Pujols, lo otro – los numeritos – no resisten un análisis más profundo.
Albert está teniendo una temporada ofensiva histórica, lamentablemente para él, es la segunda mejor del 2003. Eso no es un crimen, considerando que su competidor tiene tres temporadas consecutivas solamente comparables a temporadas de Babe Ruth. Es difícil competir contra esa realidad.
Monday, November 17, 2003
Justicia, por fin.
La única cosa que mi agitado tiempo en el trabajo me permite hoy para compartir con todos, es la de expresar mi felicidad porque al fin se hizo justicia con Alex Rodríguez y le acaban de otorgar el premio que debieron darle en 1996… ó 2000… ó 2001 y sin lugar a dudas el año pasado.
De ahora en adelante los medios nos bombardearan con toda clase de argumentos en contra de la elección de Alex (y a favor de otros ridículamente inaceptables y sin fundamento como David Ortiz y Shannon Stewart) de gente que yo incluso respeto y quiero mucho, pero que muy posiblemente estén absolutamente equivocados, y peor aun, prejuiciados.
Parte del objetivo de Los Ultimos Innings es destruir esos mitos que los comentaristas nos encargamos de crear sin ninguna base objetiva, y estoy absolutamente convencido de que en los próximos días tendremos que hacer un arduo trabajo de explicación del porque este premio no es solamente acertado, sino justo, además de una enmienda a los robos de que fue victima Alex en 1996 con Juan González y en el 2002 con Miguel Tejada.
Mi hijo, que se llama Carlos Adolfo, y que con todo y sus diecinueve meses de vida es un chiquillo brillante que crece y crece por encima de su altura todos los días, tendrá una curiosidad y un ¿Por qué? Menos para dentro de unos veinte años.
Una de mis grandes preocupaciones como padre para el futuro de mis hijos, aparte de cómo estará el medio ambiente, el dólar, el terrorismo (real e inventado), las drogas y que político de turno estará engañándonos, era cual sería mi respuesta cuando al hojear la edición del 2025 de Total Baseball se preguntaran como es que el mejor pelotero de su generación, y probablemente el segundo mejor shortstop de la historia detrás de Honus Wagner nunca ganó el MVP.
Por ese lado ya puedo dormir tranquilo.
Felicidades a Alex Rodríguez.
De ahora en adelante los medios nos bombardearan con toda clase de argumentos en contra de la elección de Alex (y a favor de otros ridículamente inaceptables y sin fundamento como David Ortiz y Shannon Stewart) de gente que yo incluso respeto y quiero mucho, pero que muy posiblemente estén absolutamente equivocados, y peor aun, prejuiciados.
Parte del objetivo de Los Ultimos Innings es destruir esos mitos que los comentaristas nos encargamos de crear sin ninguna base objetiva, y estoy absolutamente convencido de que en los próximos días tendremos que hacer un arduo trabajo de explicación del porque este premio no es solamente acertado, sino justo, además de una enmienda a los robos de que fue victima Alex en 1996 con Juan González y en el 2002 con Miguel Tejada.
Mi hijo, que se llama Carlos Adolfo, y que con todo y sus diecinueve meses de vida es un chiquillo brillante que crece y crece por encima de su altura todos los días, tendrá una curiosidad y un ¿Por qué? Menos para dentro de unos veinte años.
Una de mis grandes preocupaciones como padre para el futuro de mis hijos, aparte de cómo estará el medio ambiente, el dólar, el terrorismo (real e inventado), las drogas y que político de turno estará engañándonos, era cual sería mi respuesta cuando al hojear la edición del 2025 de Total Baseball se preguntaran como es que el mejor pelotero de su generación, y probablemente el segundo mejor shortstop de la historia detrás de Honus Wagner nunca ganó el MVP.
Por ese lado ya puedo dormir tranquilo.
Felicidades a Alex Rodríguez.
