Saturday, October 04, 2003
No Schmidt
Acaba de darse la información de que el novato Jerome Williams y no Jason Schmidt es el pitcher abridor de los Gigantes en un rato.
Esto quiere decir que lo que aplica para Dontrelle (nerviosismo probable) igual aplica para Williams. Williams no tuvo actuación este año frente a Florida, y presentó una extraña diferencia de platoon inversa - los derechos le batearon mejor que los zurdos - de .750 OPS frente a derechos y solo .577 ante zurdos.
Es decir que la bateria derecha de los Marlins, de acuerdo a la diferencia, podría no ser tan afectada con Williams en el box. De todos modos hay que advertir que esa es una diferencia "anormal" sobre la cual no se puede aun llegar a conclusiones dado el tamaño poco representativo de la muestra.
Les doy el dato de todas maneras.
Todavia pienso que los Gigantes ganan esta tarde.
Esto quiere decir que lo que aplica para Dontrelle (nerviosismo probable) igual aplica para Williams. Williams no tuvo actuación este año frente a Florida, y presentó una extraña diferencia de platoon inversa - los derechos le batearon mejor que los zurdos - de .750 OPS frente a derechos y solo .577 ante zurdos.
Es decir que la bateria derecha de los Marlins, de acuerdo a la diferencia, podría no ser tan afectada con Williams en el box. De todos modos hay que advertir que esa es una diferencia "anormal" sobre la cual no se puede aun llegar a conclusiones dado el tamaño poco representativo de la muestra.
Les doy el dato de todas maneras.
Todavia pienso que los Gigantes ganan esta tarde.
Playoffs, cuarto día
El Futuro
Anoche vimos el futuro, y el futuro es Mark Prior. Armado con una poderosa combinación de bola rápida, curva y slider duro, el jovencito de 23 años hizo lucir a la mejor ofensiva de la Liga Nacional como el equipo Panamericano de béisbol de la Republica Dominicana. Prior entró en velocidad crucero desde el momento en que un slider suyo pareció desarmar en cinco piezas a Javier Lopez y su versión física mejorada de este año, para disipar una mini amenaza después de dos outs provocada por bases por bolas consecutivas a Gary Sheffield y Chipper Jones, en un momento en que parece que Prior se dio por enterado en donde realmente estaba, y las maripositas hicieron presencia breve.
No importó, Prior recuperó la compostura al instante y de hay en adelante el enfrentamiento era desigual.
Fue abusivo.
Con la posibilidad de sonar repetitivo ó demasiado audaz les digo que Mark Prior es el mejor lanzador del béisbol en este momento. La salida de anoche ante los Bravos, en un escenario de playoff y ante una audiencia costa a costa, probablemente coloque a Prior en la conciencia colectiva de todo el béisbol.
Las mecánicas de Prior son fluidas – casi perfectas, de acuerdo a los expertos biomecánicos Will Carroll y el Dr. Mike Marshall, el mismo ganador del Cy Young en 1974 - porque él hace uso de todas las partes del cuerpo relacionadas con el movimiento de lanzar, además de terminar el movimiento exactamente de frente al home plate (cae de frente y no de lado, como Kevin Brown ó José Rijo) de forma que la pelota se mueve al home en un perfecto plano inclinado y en línea recta. Puesto que la distancia mas corta entre dos puntos es la línea recta que los une, por eso, explicado físicamente la bola rápida de Prior llega al home como lo hace.
Con todo y eso, Prior no lució anoche tan dominante como otras veces. Cierto, los Bravos apenas pudieron conectarle dos hits, pero también concedió cuatro bases por bolas (aunque tres en los primeros dos innings) y “solo” ponchó siete hombres.
Como siempre, mi unico temor sigue siendo el alto conteo de pitcheos con los que Dusty Baker ha manejado a Prior (133 anoche), Kerry Wood y Carlos Zambrano, pero de eso hablaremos luego y con más detalle.
En el otro lado del cuadrilatero el mejor lanzador de la Liga Nacional en la decada pasada, El Profesor, Greg Maddux, tuvo una de sus acostumbradas eficientes salidas. Los Cachorros aprovecharon muy bien un sencillo de Kenny Lofton, un “hit” en el cuadro de Mark Grudzielanek, un wild pitch y un granadazo de Randall Simon sobre un lanzamiento de Maddux al que solo un individuo con el control de la zona de strike de un gongorocho – como Simon – pudo haberle hecho swing. En fin que no le dieron un solo batazo contundente – salvo quizas el hit de Lofton – pero le anotaron las dos carreras.
Mala suerte para el profesor, porque en una noche como esta dos carreras pesaban como diez. La defensa de Atlanta tambien estuvo “sloppy” como dicen los Americanos. Cuatro errores, además del costoso wild pitch de Maddux en el primero que costó una carrera más y la no-ejecución en el infield hit de Grudzielanek en el mismo inning.
Para hoy los Bravos, ante la pesadilla recurrente para ellos de ser el mejor equipo de la Liga Nacional y últimamente ni siquiera poder llegar a la Serie Mundial, tendrán que depender de Russ Ortiz, el abridor del primer partido, con poco descanso.
Ya hablamos de que nos pareció una decisión cuestionable de Cox el haber iniciado la serie con Ortiz y no Maddux, y la razón era precisamente por un escenario como el de hoy. Ortiz fue bateado en el primer juego, y aunque ciertamente es un lanzador capaz, Maddux dos veces en un playoff es mejor que Ortiz dos veces en un playoff, 21 victorias ó no 21 victorias.
Los Cubs están en el asiento del conductor, y aunque posiblemente Matt Clement sea el mismo inconsistente de siempre hoy, los Cubs deben ser los favoritos para ganar el juego. El bullpen puede ser clave y decisivo para ambos lados. Mi pronostico es que el bullpen que mejor se presente hoy, ese gana el juego.
Errores Gigantes
Hay que sentir pena por Felipe Rojas Alou. No es que Felipe sea la clase de individuo que le interese la lastima de nadie (Es difícil ver a Felipe y no tener la imagen de un canciller ó un experimentado hombre de estado que filosofa sobre cualquier tema a mano) porque su personalidad es muy fuerte para esas cosas, pero uno tiene que sentir lastima.
Después del robo del que fue objeto en 1994, y luego de uno perder toda esperanza de que la vida le diera una oportunidad de redimirse, Felipe retorna con los Gigantes, haciendo un trabajo tan bueno como es de esperarse si se le dan peloteros de a de veras.
Y pasa esto.
Después que los Gigantes – por fin - fueron capaces de anotar una carrera en la primera del onceavo, José Cruz, Jr., uno de los outfielders de mejor actuación defensiva este año y un posible Guante de Oro, deja caer un fly que mi hijo Carlos Adolfo, con todo y sus dieciocho meses de vida, no hubiera tenido problemas en atrapar.
Los Marlins de su lado contaron con una gran actuación del futuro Salon de la Fama Ivan Rodríguez, quien pegó jonron de dos carreras en el primer inning, enviando el rapido mensaje a los Gigantes de que la cosa no sería tan fácil, y luego decidió con el hit de oro en el onceavo inning. También el trabajo desde el bullpen de Chad Fox, Ugueth Urbina y Carl Pavano, quienes sortearon toda clase de amenazas de los Gigantes, fue importante.
Los Gigantes jugaron un mal juego en donde parecieron estar rigidos y hasta medio presionados. En las ultimas siete entradas al menos un corredor dejaron los Gigantes en posición de anotar, del increíble total de 18 hombres que quedaron en base. Desde el mismo primer inning comenzó a verificarse el patrón que le costaría el juego a la tropa de Rojas Alou, porque aunque el error de Cheito fue clave, es probable que el juego no hubiera llegado hasta ese momento si los bates hubieran sido más oportunos.
Por ejemplo : En el mismo primer inning, Ray Durham, catalizador de ofensiva del club, conecta de hit pero Grissom, Aurilia y Bonds no pueden siquiera avanzarlo a segunda. En el segundo Edgardo Alfonzo abre con doble contra Redman, Galárraga y Santiago fallan, terminando la amenaza ipso facto, pues McKeon transfirió a Cheito intencionalmente para lanzarle al pitcher Kirk Rueter.
En el tercero después de dos outs Aurilia es transferido y Barry Bonds conecta un batazo que en cualquier otro estadio – u otra parte del Joe Robbie – hubiera sido jonron, pero en este caso Juan Pierre la capturó frente a la lejana verja del center field.
En el quinto Aurilia falló con elevadito a tercera con hombres en tercera y primera y dos outs.
En el séptimo, con el juego ya empate a dos, los Gigantes siguen atacando cuando Grissom abre con hit, y luego de el out de Aurilia y la académica base por bolas intencional a Barry, a Grissom se le ocurre la fantástica idea de irse al robo de tercera con Ivan Rodríguez de catcher contrario.
Genial.
Eventualmente Alfonzo recibió la base por bolas de Chad Fox y lo que habría sido bases llenas y un out finalmente se volvió nada cuando Galárraga se ponchó sin tirarle. Aquí pudo haber estado el juego.
En el octavo Jack Thomas Show y Ray Durham fallaron en traer la ventaja desde segunda.
En el noveno después de dos outs Bonds es boleado intencionalmente, Alfonzo pega hit al right llegando Bonds a tercera, pero Torrealba falla con linea al right.
En el décimo después de dos outs se embasan dos, pero Grissom no produce fallando en fielders choice.
Finalmente en el onceavo tanto fue el cantaro al agua que se rompió, ó más bien se le hizo un pequeño hoyo, porque los Gigantes convirtieron un posible rally en tan solo una carrera. Aurilia fue transferido por Braden Looper, y Bonds ( a quien esta vez no habia otra alternativa que pitcharle) conecto un torpedo por el medio del terreno que por justicia debio ser anotado como hit de tan solo lo duro que le pegó a la pelota, pero como estaba la formación a la dwerecha, Alex Gonzalez fildeó, o más bien no fildeó para un error. Alfonzo conecto el hit empujador y el inning parecia grande para los Hombres G.
Como diría mi querido Ernesto Kranwinkel, !Que va!.
Felipe decidió jugar conservador sacrificando a Torrealba para que bateara Neifi Perez, quien fue boleado por McKeon, preparando la posibilidad de force por cualquier vía. Que fue exactamente lo que ocurrió cuando Cruz bateó para FC y Show cerró el inning con rodado a segunda.
Un exceso de oportunidades fallidas de abrir el juego. Los Marlins también desaprovecharon chances en el octavo, noveno y décimo, pero no como los Gigantes.
Así que hoy Rojas Alou no le queda opción que tirar a su mejor pitcher, Jason Schmidt, con tres días de descanso, esperanzado en que la serie retorne a la bahía.
Yo pienso que todavía hay chance. Dontrelle Willis es un buen pitcher joven, pero quien sabe si la atmósfera de sesenta mil personas lo ponga nervioso y los Gigantes aprovechen eso. Ademas, como ya hemos comentado, los Gigantes aniquilan el pitcheo zurdo, aunque eso no pasó ayer contra Redman.
¿Pronostico? Schmidt le dará seis innings sólidos a Felipe y los Gigantes se aprovecharan del descontrol de Willis más el primer jonron de Barry en la serie y retornaran mañana a San Francisco.
Los números que saldrán en el Lotto hoy serán ...
Anoche vimos el futuro, y el futuro es Mark Prior. Armado con una poderosa combinación de bola rápida, curva y slider duro, el jovencito de 23 años hizo lucir a la mejor ofensiva de la Liga Nacional como el equipo Panamericano de béisbol de la Republica Dominicana. Prior entró en velocidad crucero desde el momento en que un slider suyo pareció desarmar en cinco piezas a Javier Lopez y su versión física mejorada de este año, para disipar una mini amenaza después de dos outs provocada por bases por bolas consecutivas a Gary Sheffield y Chipper Jones, en un momento en que parece que Prior se dio por enterado en donde realmente estaba, y las maripositas hicieron presencia breve.
No importó, Prior recuperó la compostura al instante y de hay en adelante el enfrentamiento era desigual.
Fue abusivo.
Con la posibilidad de sonar repetitivo ó demasiado audaz les digo que Mark Prior es el mejor lanzador del béisbol en este momento. La salida de anoche ante los Bravos, en un escenario de playoff y ante una audiencia costa a costa, probablemente coloque a Prior en la conciencia colectiva de todo el béisbol.
Las mecánicas de Prior son fluidas – casi perfectas, de acuerdo a los expertos biomecánicos Will Carroll y el Dr. Mike Marshall, el mismo ganador del Cy Young en 1974 - porque él hace uso de todas las partes del cuerpo relacionadas con el movimiento de lanzar, además de terminar el movimiento exactamente de frente al home plate (cae de frente y no de lado, como Kevin Brown ó José Rijo) de forma que la pelota se mueve al home en un perfecto plano inclinado y en línea recta. Puesto que la distancia mas corta entre dos puntos es la línea recta que los une, por eso, explicado físicamente la bola rápida de Prior llega al home como lo hace.
Con todo y eso, Prior no lució anoche tan dominante como otras veces. Cierto, los Bravos apenas pudieron conectarle dos hits, pero también concedió cuatro bases por bolas (aunque tres en los primeros dos innings) y “solo” ponchó siete hombres.
Como siempre, mi unico temor sigue siendo el alto conteo de pitcheos con los que Dusty Baker ha manejado a Prior (133 anoche), Kerry Wood y Carlos Zambrano, pero de eso hablaremos luego y con más detalle.
En el otro lado del cuadrilatero el mejor lanzador de la Liga Nacional en la decada pasada, El Profesor, Greg Maddux, tuvo una de sus acostumbradas eficientes salidas. Los Cachorros aprovecharon muy bien un sencillo de Kenny Lofton, un “hit” en el cuadro de Mark Grudzielanek, un wild pitch y un granadazo de Randall Simon sobre un lanzamiento de Maddux al que solo un individuo con el control de la zona de strike de un gongorocho – como Simon – pudo haberle hecho swing. En fin que no le dieron un solo batazo contundente – salvo quizas el hit de Lofton – pero le anotaron las dos carreras.
Mala suerte para el profesor, porque en una noche como esta dos carreras pesaban como diez. La defensa de Atlanta tambien estuvo “sloppy” como dicen los Americanos. Cuatro errores, además del costoso wild pitch de Maddux en el primero que costó una carrera más y la no-ejecución en el infield hit de Grudzielanek en el mismo inning.
Para hoy los Bravos, ante la pesadilla recurrente para ellos de ser el mejor equipo de la Liga Nacional y últimamente ni siquiera poder llegar a la Serie Mundial, tendrán que depender de Russ Ortiz, el abridor del primer partido, con poco descanso.
Ya hablamos de que nos pareció una decisión cuestionable de Cox el haber iniciado la serie con Ortiz y no Maddux, y la razón era precisamente por un escenario como el de hoy. Ortiz fue bateado en el primer juego, y aunque ciertamente es un lanzador capaz, Maddux dos veces en un playoff es mejor que Ortiz dos veces en un playoff, 21 victorias ó no 21 victorias.
Los Cubs están en el asiento del conductor, y aunque posiblemente Matt Clement sea el mismo inconsistente de siempre hoy, los Cubs deben ser los favoritos para ganar el juego. El bullpen puede ser clave y decisivo para ambos lados. Mi pronostico es que el bullpen que mejor se presente hoy, ese gana el juego.
Errores Gigantes
Hay que sentir pena por Felipe Rojas Alou. No es que Felipe sea la clase de individuo que le interese la lastima de nadie (Es difícil ver a Felipe y no tener la imagen de un canciller ó un experimentado hombre de estado que filosofa sobre cualquier tema a mano) porque su personalidad es muy fuerte para esas cosas, pero uno tiene que sentir lastima.
Después del robo del que fue objeto en 1994, y luego de uno perder toda esperanza de que la vida le diera una oportunidad de redimirse, Felipe retorna con los Gigantes, haciendo un trabajo tan bueno como es de esperarse si se le dan peloteros de a de veras.
Y pasa esto.
Después que los Gigantes – por fin - fueron capaces de anotar una carrera en la primera del onceavo, José Cruz, Jr., uno de los outfielders de mejor actuación defensiva este año y un posible Guante de Oro, deja caer un fly que mi hijo Carlos Adolfo, con todo y sus dieciocho meses de vida, no hubiera tenido problemas en atrapar.
Los Marlins de su lado contaron con una gran actuación del futuro Salon de la Fama Ivan Rodríguez, quien pegó jonron de dos carreras en el primer inning, enviando el rapido mensaje a los Gigantes de que la cosa no sería tan fácil, y luego decidió con el hit de oro en el onceavo inning. También el trabajo desde el bullpen de Chad Fox, Ugueth Urbina y Carl Pavano, quienes sortearon toda clase de amenazas de los Gigantes, fue importante.
Los Gigantes jugaron un mal juego en donde parecieron estar rigidos y hasta medio presionados. En las ultimas siete entradas al menos un corredor dejaron los Gigantes en posición de anotar, del increíble total de 18 hombres que quedaron en base. Desde el mismo primer inning comenzó a verificarse el patrón que le costaría el juego a la tropa de Rojas Alou, porque aunque el error de Cheito fue clave, es probable que el juego no hubiera llegado hasta ese momento si los bates hubieran sido más oportunos.
Por ejemplo : En el mismo primer inning, Ray Durham, catalizador de ofensiva del club, conecta de hit pero Grissom, Aurilia y Bonds no pueden siquiera avanzarlo a segunda. En el segundo Edgardo Alfonzo abre con doble contra Redman, Galárraga y Santiago fallan, terminando la amenaza ipso facto, pues McKeon transfirió a Cheito intencionalmente para lanzarle al pitcher Kirk Rueter.
En el tercero después de dos outs Aurilia es transferido y Barry Bonds conecta un batazo que en cualquier otro estadio – u otra parte del Joe Robbie – hubiera sido jonron, pero en este caso Juan Pierre la capturó frente a la lejana verja del center field.
En el quinto Aurilia falló con elevadito a tercera con hombres en tercera y primera y dos outs.
En el séptimo, con el juego ya empate a dos, los Gigantes siguen atacando cuando Grissom abre con hit, y luego de el out de Aurilia y la académica base por bolas intencional a Barry, a Grissom se le ocurre la fantástica idea de irse al robo de tercera con Ivan Rodríguez de catcher contrario.
Genial.
Eventualmente Alfonzo recibió la base por bolas de Chad Fox y lo que habría sido bases llenas y un out finalmente se volvió nada cuando Galárraga se ponchó sin tirarle. Aquí pudo haber estado el juego.
En el octavo Jack Thomas Show y Ray Durham fallaron en traer la ventaja desde segunda.
En el noveno después de dos outs Bonds es boleado intencionalmente, Alfonzo pega hit al right llegando Bonds a tercera, pero Torrealba falla con linea al right.
En el décimo después de dos outs se embasan dos, pero Grissom no produce fallando en fielders choice.
Finalmente en el onceavo tanto fue el cantaro al agua que se rompió, ó más bien se le hizo un pequeño hoyo, porque los Gigantes convirtieron un posible rally en tan solo una carrera. Aurilia fue transferido por Braden Looper, y Bonds ( a quien esta vez no habia otra alternativa que pitcharle) conecto un torpedo por el medio del terreno que por justicia debio ser anotado como hit de tan solo lo duro que le pegó a la pelota, pero como estaba la formación a la dwerecha, Alex Gonzalez fildeó, o más bien no fildeó para un error. Alfonzo conecto el hit empujador y el inning parecia grande para los Hombres G.
Como diría mi querido Ernesto Kranwinkel, !Que va!.
Felipe decidió jugar conservador sacrificando a Torrealba para que bateara Neifi Perez, quien fue boleado por McKeon, preparando la posibilidad de force por cualquier vía. Que fue exactamente lo que ocurrió cuando Cruz bateó para FC y Show cerró el inning con rodado a segunda.
Un exceso de oportunidades fallidas de abrir el juego. Los Marlins también desaprovecharon chances en el octavo, noveno y décimo, pero no como los Gigantes.
Así que hoy Rojas Alou no le queda opción que tirar a su mejor pitcher, Jason Schmidt, con tres días de descanso, esperanzado en que la serie retorne a la bahía.
Yo pienso que todavía hay chance. Dontrelle Willis es un buen pitcher joven, pero quien sabe si la atmósfera de sesenta mil personas lo ponga nervioso y los Gigantes aprovechen eso. Ademas, como ya hemos comentado, los Gigantes aniquilan el pitcheo zurdo, aunque eso no pasó ayer contra Redman.
¿Pronostico? Schmidt le dará seis innings sólidos a Felipe y los Gigantes se aprovecharan del descontrol de Willis más el primer jonron de Barry en la serie y retornaran mañana a San Francisco.
Los números que saldrán en el Lotto hoy serán ...
Friday, October 03, 2003
Playoffs, tercer día
Dandy Andy
Los Yankees acaban de ganar un partido en donde su victoria en sí no es sorpresa, pero probablemente sea sorpresiva la buena actuación del abridor de Minnesota Brad Radke, quien se enfrascó en un buen duelo lanzamiento por lanzamiento contra un fantastico Andy Pettite.
Tampoco es sorpresa la brillante actuación de Pettite, que en poco obedece al hecho de que él posea algún tipo de “poder mágico” que lo hace ser un “lanzador del clutch en post-temporada”, como la mayoría de los medios han reseñado hoy, haciendo gala y libre uso de los repetidísimos cliches de siempre. Seguro, Andy es un tremendo pitcher, y es por eso que ha lanzado bien en post-temporada, pero el handicap principal a su favor anoche era el siguiente:
Lo anterior es: AVG, OBP y SLG, y como se ve y ya habíamos hablado hace dos días, los Mellizos no batean igual ante los zurdos. Como esta es una situación clara y a la vista, yo pensaba que Ron Gardenhire iba a ser un poquito más creativo y colocaría al menos un par de bateadores derechos más en el lineup para contrarrestar su notoria desventaja en el platoon.
Eso no ocurrió. ¿El resultado? Los bateadores zurdos y ambidextros de los Twins batearon de 17-0 con 6 ponches frente a Pettite. Puesto que Gardenhire utilizó el mismo lineup del primer día su ofensiva tuvo la desventaja del platoon en cuatro de los nueve turnos, más el bateador de ambas manos Cristian Guzmán.
Es una pena - para los Mellizos, quiero decir – que Gardenhire no se arriesgara teniendo a tres derechos en la banca, Dustan Mohr (.265/ .348/ .453 vs. PZ), Lew Ford (.297/ .366/ .541 vs. PZ) y Michael Cuddyer, a dos de los cuales pudo perfectamente insertar en el lineup por Jacque Jones (.269/ .310 / .369 vs. PZ) y/o Doug Mientkiewicz.
De vez en cuando no es malo tomar una pagina del libro de Davey Johnson, quien en la Serie Divisional de la Liga Americana en 1997, le llenó el lineup de derechos a Randy Johnson, sentando a Roberto Alomar, Rafael Palmeiro y B.J. Surhoff y colocando a los derechos Jeff Reboulet, Eric Davis y Jerome Walton. Con el lineup lleno de derechos los Orioles le anotaron cinco carreras en cinco innings en el primer juego a Randy Jonson, ganando eventualmente 9-3 y en el cuarto juego Jeff Reboulet (jugando por Alomar) le conectó un jonron clave a La Gran Unidad ganando Baltimore el juego 3-1 y de paso tambien la serie.
Yo no digo que funcione todos los días, pero no veo nada de malo en hacer la prueba, sobre todo si ya tu tienes una ventaja de 1-0 en la serie. Puesto que Joe Torre ya se percató de los problemas de los Twins frente a zurdos, David Wells ha sido anunciado para el cuarto juego. La pregunta es si Gardenhire se arriesgará a ser creativo esta vez.
Medias Rojas vs. Atleticos
Por el resultado de este juego está claro que mis aspiraciones de clarividente acaban de sufrir un rudo golpe. Sin embargo, algunas cosas del análisis de ayer se aplicaron. Como dijimos, Tim Wakefield es un lanzador valioso, pero el grueso de su valor, en una serie corta, se diluye. Él tiró un buen juego y su defensa lo saboteó, pero Barry Zito simplemente tuvo una tarde al estilo Barry Zito, y en términos efectivos el juego se acabó en el tercer inning.
Los Medias Rojas se han colocado a si mismos de espaldas a la pared, sus oportunidades para el juego de mañana no son malas, pero aun tendrían que ganar el domingo y el lunes (aunque el lunes sería Pedro, pero hay que llegar hasta el lunes) con Derek Lowe (51 lanzamientos en relevo el miércoles) y John Burkett.
La ofensiva en particular ha estado ausente, contribuyendo más a la tradicional idea que el buen pitcheo siempre detiene al buen bateo. Manny Ramirez y David Ortiz, cuarto y quinto bates, han desaparecido y encima de eso la defensa no ha ejecutado en el momento oportuno. No es solamente los errores materiales, es por ejemplo Manny Ramirez tomando un mal primer paso y una peor ruta al batazo de Erubiel Durazo en el noveno inning del primer juego.
Boston necesita batear mucho el sábado y el domingo para poder apoyar a un pitcheo abridor que a mi juicio no va a ser mas que adecuado, y por supuesto, el relevo tiene que ponerse los pantalones y responder con buenas apariciones. Ayer al menos Williamson y Embree lucieron bien.
Juegos de hoy
Mark Redman no terminó bien y los Gigantes acaban con los pitchers zurdos, pero aun así este es un juego difícil de pronosticar. Redman amenazó con que no iba a rehuirle a lanzarle a Barry Bonds, así que esperemos que resultados tendrá ese anuncio.
El juego del día es el duelo de Greg Maddux y Mark Prior. Probablemente Dusty Baker tenga la ventaja de no tener que utilizar a sus relevistas secundarios, considerando que Prior generalmente va profundo en los juegos. Anticipo un gran juego, cerrado, y en el que la pobre velocidad en las bases de los Cubs (no se si lo han notado pero en general este es un equipo horrorosamente lento) que no permite casi nunca alcanzar la base extra, les puede jugar una mala pasada si Greg Maddux se presenta en uno de esos días en que todos los batazos parecen machucones al box.
Vital juego para los Cachorros porque de ganar tendrán a Horacio Ramírez muy probablemente en un juego de vida o muerte para Atlanta en un delirante Wrigley Field el domingo.
Los Yankees acaban de ganar un partido en donde su victoria en sí no es sorpresa, pero probablemente sea sorpresiva la buena actuación del abridor de Minnesota Brad Radke, quien se enfrascó en un buen duelo lanzamiento por lanzamiento contra un fantastico Andy Pettite.
Tampoco es sorpresa la brillante actuación de Pettite, que en poco obedece al hecho de que él posea algún tipo de “poder mágico” que lo hace ser un “lanzador del clutch en post-temporada”, como la mayoría de los medios han reseñado hoy, haciendo gala y libre uso de los repetidísimos cliches de siempre. Seguro, Andy es un tremendo pitcher, y es por eso que ha lanzado bien en post-temporada, pero el handicap principal a su favor anoche era el siguiente:
| 2003 | Vs.Derechos | Vs.Zurdos |
|---|---|---|
| Twins | .286/ .349/ .440 | 255 / .323/ .406 |
Lo anterior es: AVG, OBP y SLG, y como se ve y ya habíamos hablado hace dos días, los Mellizos no batean igual ante los zurdos. Como esta es una situación clara y a la vista, yo pensaba que Ron Gardenhire iba a ser un poquito más creativo y colocaría al menos un par de bateadores derechos más en el lineup para contrarrestar su notoria desventaja en el platoon.
Eso no ocurrió. ¿El resultado? Los bateadores zurdos y ambidextros de los Twins batearon de 17-0 con 6 ponches frente a Pettite. Puesto que Gardenhire utilizó el mismo lineup del primer día su ofensiva tuvo la desventaja del platoon en cuatro de los nueve turnos, más el bateador de ambas manos Cristian Guzmán.
Es una pena - para los Mellizos, quiero decir – que Gardenhire no se arriesgara teniendo a tres derechos en la banca, Dustan Mohr (.265/ .348/ .453 vs. PZ), Lew Ford (.297/ .366/ .541 vs. PZ) y Michael Cuddyer, a dos de los cuales pudo perfectamente insertar en el lineup por Jacque Jones (.269/ .310 / .369 vs. PZ) y/o Doug Mientkiewicz.
De vez en cuando no es malo tomar una pagina del libro de Davey Johnson, quien en la Serie Divisional de la Liga Americana en 1997, le llenó el lineup de derechos a Randy Johnson, sentando a Roberto Alomar, Rafael Palmeiro y B.J. Surhoff y colocando a los derechos Jeff Reboulet, Eric Davis y Jerome Walton. Con el lineup lleno de derechos los Orioles le anotaron cinco carreras en cinco innings en el primer juego a Randy Jonson, ganando eventualmente 9-3 y en el cuarto juego Jeff Reboulet (jugando por Alomar) le conectó un jonron clave a La Gran Unidad ganando Baltimore el juego 3-1 y de paso tambien la serie.
Yo no digo que funcione todos los días, pero no veo nada de malo en hacer la prueba, sobre todo si ya tu tienes una ventaja de 1-0 en la serie. Puesto que Joe Torre ya se percató de los problemas de los Twins frente a zurdos, David Wells ha sido anunciado para el cuarto juego. La pregunta es si Gardenhire se arriesgará a ser creativo esta vez.
Medias Rojas vs. Atleticos
Por el resultado de este juego está claro que mis aspiraciones de clarividente acaban de sufrir un rudo golpe. Sin embargo, algunas cosas del análisis de ayer se aplicaron. Como dijimos, Tim Wakefield es un lanzador valioso, pero el grueso de su valor, en una serie corta, se diluye. Él tiró un buen juego y su defensa lo saboteó, pero Barry Zito simplemente tuvo una tarde al estilo Barry Zito, y en términos efectivos el juego se acabó en el tercer inning.
Los Medias Rojas se han colocado a si mismos de espaldas a la pared, sus oportunidades para el juego de mañana no son malas, pero aun tendrían que ganar el domingo y el lunes (aunque el lunes sería Pedro, pero hay que llegar hasta el lunes) con Derek Lowe (51 lanzamientos en relevo el miércoles) y John Burkett.
La ofensiva en particular ha estado ausente, contribuyendo más a la tradicional idea que el buen pitcheo siempre detiene al buen bateo. Manny Ramirez y David Ortiz, cuarto y quinto bates, han desaparecido y encima de eso la defensa no ha ejecutado en el momento oportuno. No es solamente los errores materiales, es por ejemplo Manny Ramirez tomando un mal primer paso y una peor ruta al batazo de Erubiel Durazo en el noveno inning del primer juego.
Boston necesita batear mucho el sábado y el domingo para poder apoyar a un pitcheo abridor que a mi juicio no va a ser mas que adecuado, y por supuesto, el relevo tiene que ponerse los pantalones y responder con buenas apariciones. Ayer al menos Williamson y Embree lucieron bien.
Juegos de hoy
Mark Redman no terminó bien y los Gigantes acaban con los pitchers zurdos, pero aun así este es un juego difícil de pronosticar. Redman amenazó con que no iba a rehuirle a lanzarle a Barry Bonds, así que esperemos que resultados tendrá ese anuncio.
El juego del día es el duelo de Greg Maddux y Mark Prior. Probablemente Dusty Baker tenga la ventaja de no tener que utilizar a sus relevistas secundarios, considerando que Prior generalmente va profundo en los juegos. Anticipo un gran juego, cerrado, y en el que la pobre velocidad en las bases de los Cubs (no se si lo han notado pero en general este es un equipo horrorosamente lento) que no permite casi nunca alcanzar la base extra, les puede jugar una mala pasada si Greg Maddux se presenta en uno de esos días en que todos los batazos parecen machucones al box.
Vital juego para los Cachorros porque de ganar tendrán a Horacio Ramírez muy probablemente en un juego de vida o muerte para Atlanta en un delirante Wrigley Field el domingo.
Thursday, October 02, 2003
Playoffs, Segundo día
Pasó.
El temor de todos y cada uno de los fanáticos de Boston (y todos aquellos que desean su victoria) de que el bullpen, al igual que en la temporada regular, se encargaría de sabotear los esfuerzos del pitcheo abridor y la ofensiva, se cumplió anoche al pie de la letra, justo como el libreto de la tragedia que hemos presenciado repetidamente desde el mismo primer día de Abril.
Pero por otro lado, este fue un fantástico juego de pelota, digno de ser jugado a una hora en que no-solo el publico al Oeste de las montañas rocosas pudiera presenciarlo, e igualmente digno de que tres cuartas partes de la Republica Dominicana tuviera energía eléctrica para disfrutarlo.
El final no pudo ser mas impredecible, un squeeze con las bases llenas, dos outs y ejecutado por un catcher.
Independientemente del fracaso del bullpen, yo creo que es importante referirse a la salida de Pedro Martínez. Era evidente que Pedro no estaba en uno de esos días en que los bateadores lucen como indefensos boy scouts ante su grandeza. Martínez cruzó las dos primeras entradas sin mayores inconvenientes, pero ya en el tercero vinieron las dificultades con tres hits, una base, tres carreras y un total de veinte lanzamientos en la entrada. Luego de solamente necesitar 27 pitcheos para sacar ceros en los primeros dos innings, pedro tuvo 20, 18, 17, 13 y 33 en los siguientes cinco episodios. Eso es un promedio de veinte por inning y a ese ritmo no hay pitcher que pueda aguantar hasta un noveno inning.
Pedro batalló en los siguientes cuatro episodios embasando corredores en cada uno menos el sexto (su entrada más fácil desde la primera) hasta llegar al tormentoso séptimo inning en donde un error de Todd Walker le complicó la existencia, eventualmente teniendo la necesidad de hacer 33 lanzamientos y de paso decretando su salida irremediable del montículo. La imposibilidad de Walker de completar la doble matanza costó 18 lanzamientos extras, y aunque yo no creo que Grady Little iba a iniciar el octavo con su estelar, esos 18 lanzamientos podrían estar significando mucho el domingo ó el martes, digo esto porque el trabajo de ayer descarta de plano a Pedro para el domingo con tres días de descanso ( lo cual por cierto nunca ha hecho) y en un posible quinto juego hay que ver que efecto ( si alguno) tienen esos 130 lanzamientos, el total más alto del año para Martínez.
¿Qué le espera a Boston? Bueno, siempre es doloroso perder un juego en el que estas adelante faltando un out, pero los Medias Rojas deben pensar ahora en el juego más importante del año para ellos, el de esta tarde. Lo deseable para su causa es que el nudillo de Tim Wakefield (siempre impredecible) se torne indescifrable para los bates de los Atléticos, y, mejor aun, que Wakefield pueda llegar lejos en el juego para darle un poco más de descanso al bullpen, no necesariamente porque los principales hombres trabajaran en exceso anoche (Scott Williamson fue quien más lanzamientos hizo con 18) sino porque el relevista más trabajado con 42 pitcheos en 1.2 innings es precisamente el abridor del partido del sábado y ese es Derek Lowe.
Una de las ironías de tener un lanzador como Wakefield es que la característica que lo hace ser un lanzador valioso, lanzar 200 entradas a un nivel promedio y en distintos roles, es de poco valor en la post temporada. Boston no necesita 6 ó 7 innings aceptables de Wakefield, necesita 6 ó 7 buenos innings, porque aunque su ofensiva perfectamente puede hacer siete carreras en un día, acá estamos hablando de hacerlas ante Barry Zito.
En cuanto a Barry Zito, él ha sido un lanzador errático este año, pero aun así terminó entre los primeros quince mejores abridores del béisbol de acuerdo a Baseball Prospectus, y si tomamos en cuenta, como dijimos ayer que la ofensiva de Boston no es tan explosiva ente pitcheo zurdo, pues los Medias Rojas necesitan emplearse bien a fondo para no salir de California con desventaja 0-2.
¿Pronostico para hoy? Improvisando rápido, la mediocre ofensiva de Oakland no puede hacerle más de tres a Wakefield en siete entradas, y los bateadores derechos de Boston (Nomar, Manny y Kevin Millar) se combinan con cuatro bases por bolas de Zito y los Medias Rojas ganan cinco por tres empatando la serie.
Pregúntenme ahora los números del Lotto.
Marlins – Gigantes
Los Marlins ganaron el juego que más posibilidades tenían de ganar en Pac Bell, combinando una salida mediocre de Sidney Ponson, con un pobre desempeño de la defensa y una actuación inesperadamente mala de Joe Nathan quien ha sido una de las principales y más efectivas piezas del bullpen de Felipe Rojas Alou. Además, y como comentamos ayer, Juan Pierre y Luis Castillo estuvieron en las bases cinco veces en el juego, aumentando las probabilidades de anotar carreras y ganar el juego, como ciertamente pasó.
La otra cara de la moneda fue el bullpen de los peces, que apenas permitió dos hits en las ultimas 4 entradas y dos tercios, retirando catorce de los dieciséis últimos contrarios. Carl Pavano sacó los dos outs más importantes del juego dominando a Edgardo Alfonzo y Benito Santiago con las bases llenas. Los Gigantes no anotarían una mas y la serie está empatada.
Para mañana en Miami se enfrentarán los zurdos Kirk Rueter y Mark Redman. Los Gigantes acaban con los lanzadores zurdos y Mark Redman no lanzó tan bien en la segunda mitad (de hecho sus ultimas salidas fueron horribles) lo cual es un handicap a favor de los Hombres-G. De igual manera el vetarano Rueter no estuvo tan efectivo fuera del Pac Bell, pero el Joe Robbie Stadium (no me gusta el nombre corporativo que Wayne Huizenga le pegó) es un estadio de dimensiones agradables para un pitcher con tendencias aéreas como Rueter.
Por ultimo, ya tres lanzadores que se supone estaran lanzando a partir de la tercera fecha han sido utilizados como relevistas, Derek Lowe, Richard James Harden y Dontrelle Willis han sido requeridos por sus managers para situaciones especificas y particulares. Siempre se dice que en playoffs se dirige distinto, y es cierto.
Cachorros - Bravos
Seré breve aquí en puntos rápidos.
Los Cubs no batean y me parece que su aspiración es verse envueltos en la mayor cantidad de juegos 4-2 ó 3-1 posibles porque si es un carreraje casi seguro Chicago saldrá con la peor parte.
Mark DeRosa, uno de los mejores infielders sustitutos de las mayores, fue clave jugando anoche por el lesionado Marcus Giles bateando de 5-2, remolcando dos, y de paso echando a perder la decisión de Dusty Baker de no traer a Mike Remlinger a lanzarle a Rafael Furcal, sino preferir que Dave Veres lo transfiriera para lanzarle a DeRosa. El resultado fue el doble de DeRosa remolcando las dos de la victoria para los Bravos.
La disponibilidad de John Smoltz es critica para las aspiraciones de Atlanta. La actuación de ayer debe tener a Bobby Cox y Leo Mazzone con emociones mezcladas porque Smoltz no lució tan efectivo en el octavo, y el torpe corrido de bases de Randall Simon parece haberle evitado mayores males a Smoltz. De todas formas el noveno fue con pocas eventualidades salvo los ocho lanzamientos que necesitó para sacar de out a Troy O’Leary. Aplauso para Bobby Cox quien al igual que Ken Macha cuatro horas más tarde, tiró por el suelo la absurda idea de que el mejor relevista (“el cerrador”) debe solo lanzar con una ventaja.
El temor de todos y cada uno de los fanáticos de Boston (y todos aquellos que desean su victoria) de que el bullpen, al igual que en la temporada regular, se encargaría de sabotear los esfuerzos del pitcheo abridor y la ofensiva, se cumplió anoche al pie de la letra, justo como el libreto de la tragedia que hemos presenciado repetidamente desde el mismo primer día de Abril.
Pero por otro lado, este fue un fantástico juego de pelota, digno de ser jugado a una hora en que no-solo el publico al Oeste de las montañas rocosas pudiera presenciarlo, e igualmente digno de que tres cuartas partes de la Republica Dominicana tuviera energía eléctrica para disfrutarlo.
El final no pudo ser mas impredecible, un squeeze con las bases llenas, dos outs y ejecutado por un catcher.
Independientemente del fracaso del bullpen, yo creo que es importante referirse a la salida de Pedro Martínez. Era evidente que Pedro no estaba en uno de esos días en que los bateadores lucen como indefensos boy scouts ante su grandeza. Martínez cruzó las dos primeras entradas sin mayores inconvenientes, pero ya en el tercero vinieron las dificultades con tres hits, una base, tres carreras y un total de veinte lanzamientos en la entrada. Luego de solamente necesitar 27 pitcheos para sacar ceros en los primeros dos innings, pedro tuvo 20, 18, 17, 13 y 33 en los siguientes cinco episodios. Eso es un promedio de veinte por inning y a ese ritmo no hay pitcher que pueda aguantar hasta un noveno inning.
Pedro batalló en los siguientes cuatro episodios embasando corredores en cada uno menos el sexto (su entrada más fácil desde la primera) hasta llegar al tormentoso séptimo inning en donde un error de Todd Walker le complicó la existencia, eventualmente teniendo la necesidad de hacer 33 lanzamientos y de paso decretando su salida irremediable del montículo. La imposibilidad de Walker de completar la doble matanza costó 18 lanzamientos extras, y aunque yo no creo que Grady Little iba a iniciar el octavo con su estelar, esos 18 lanzamientos podrían estar significando mucho el domingo ó el martes, digo esto porque el trabajo de ayer descarta de plano a Pedro para el domingo con tres días de descanso ( lo cual por cierto nunca ha hecho) y en un posible quinto juego hay que ver que efecto ( si alguno) tienen esos 130 lanzamientos, el total más alto del año para Martínez.
¿Qué le espera a Boston? Bueno, siempre es doloroso perder un juego en el que estas adelante faltando un out, pero los Medias Rojas deben pensar ahora en el juego más importante del año para ellos, el de esta tarde. Lo deseable para su causa es que el nudillo de Tim Wakefield (siempre impredecible) se torne indescifrable para los bates de los Atléticos, y, mejor aun, que Wakefield pueda llegar lejos en el juego para darle un poco más de descanso al bullpen, no necesariamente porque los principales hombres trabajaran en exceso anoche (Scott Williamson fue quien más lanzamientos hizo con 18) sino porque el relevista más trabajado con 42 pitcheos en 1.2 innings es precisamente el abridor del partido del sábado y ese es Derek Lowe.
Una de las ironías de tener un lanzador como Wakefield es que la característica que lo hace ser un lanzador valioso, lanzar 200 entradas a un nivel promedio y en distintos roles, es de poco valor en la post temporada. Boston no necesita 6 ó 7 innings aceptables de Wakefield, necesita 6 ó 7 buenos innings, porque aunque su ofensiva perfectamente puede hacer siete carreras en un día, acá estamos hablando de hacerlas ante Barry Zito.
En cuanto a Barry Zito, él ha sido un lanzador errático este año, pero aun así terminó entre los primeros quince mejores abridores del béisbol de acuerdo a Baseball Prospectus, y si tomamos en cuenta, como dijimos ayer que la ofensiva de Boston no es tan explosiva ente pitcheo zurdo, pues los Medias Rojas necesitan emplearse bien a fondo para no salir de California con desventaja 0-2.
¿Pronostico para hoy? Improvisando rápido, la mediocre ofensiva de Oakland no puede hacerle más de tres a Wakefield en siete entradas, y los bateadores derechos de Boston (Nomar, Manny y Kevin Millar) se combinan con cuatro bases por bolas de Zito y los Medias Rojas ganan cinco por tres empatando la serie.
Pregúntenme ahora los números del Lotto.
Marlins – Gigantes
Los Marlins ganaron el juego que más posibilidades tenían de ganar en Pac Bell, combinando una salida mediocre de Sidney Ponson, con un pobre desempeño de la defensa y una actuación inesperadamente mala de Joe Nathan quien ha sido una de las principales y más efectivas piezas del bullpen de Felipe Rojas Alou. Además, y como comentamos ayer, Juan Pierre y Luis Castillo estuvieron en las bases cinco veces en el juego, aumentando las probabilidades de anotar carreras y ganar el juego, como ciertamente pasó.
La otra cara de la moneda fue el bullpen de los peces, que apenas permitió dos hits en las ultimas 4 entradas y dos tercios, retirando catorce de los dieciséis últimos contrarios. Carl Pavano sacó los dos outs más importantes del juego dominando a Edgardo Alfonzo y Benito Santiago con las bases llenas. Los Gigantes no anotarían una mas y la serie está empatada.
Para mañana en Miami se enfrentarán los zurdos Kirk Rueter y Mark Redman. Los Gigantes acaban con los lanzadores zurdos y Mark Redman no lanzó tan bien en la segunda mitad (de hecho sus ultimas salidas fueron horribles) lo cual es un handicap a favor de los Hombres-G. De igual manera el vetarano Rueter no estuvo tan efectivo fuera del Pac Bell, pero el Joe Robbie Stadium (no me gusta el nombre corporativo que Wayne Huizenga le pegó) es un estadio de dimensiones agradables para un pitcher con tendencias aéreas como Rueter.
Por ultimo, ya tres lanzadores que se supone estaran lanzando a partir de la tercera fecha han sido utilizados como relevistas, Derek Lowe, Richard James Harden y Dontrelle Willis han sido requeridos por sus managers para situaciones especificas y particulares. Siempre se dice que en playoffs se dirige distinto, y es cierto.
Cachorros - Bravos
Seré breve aquí en puntos rápidos.
Los Cubs no batean y me parece que su aspiración es verse envueltos en la mayor cantidad de juegos 4-2 ó 3-1 posibles porque si es un carreraje casi seguro Chicago saldrá con la peor parte.
Mark DeRosa, uno de los mejores infielders sustitutos de las mayores, fue clave jugando anoche por el lesionado Marcus Giles bateando de 5-2, remolcando dos, y de paso echando a perder la decisión de Dusty Baker de no traer a Mike Remlinger a lanzarle a Rafael Furcal, sino preferir que Dave Veres lo transfiriera para lanzarle a DeRosa. El resultado fue el doble de DeRosa remolcando las dos de la victoria para los Bravos.
La disponibilidad de John Smoltz es critica para las aspiraciones de Atlanta. La actuación de ayer debe tener a Bobby Cox y Leo Mazzone con emociones mezcladas porque Smoltz no lució tan efectivo en el octavo, y el torpe corrido de bases de Randall Simon parece haberle evitado mayores males a Smoltz. De todas formas el noveno fue con pocas eventualidades salvo los ocho lanzamientos que necesitó para sacar de out a Troy O’Leary. Aplauso para Bobby Cox quien al igual que Ken Macha cuatro horas más tarde, tiró por el suelo la absurda idea de que el mejor relevista (“el cerrador”) debe solo lanzar con una ventaja.
Wednesday, October 01, 2003
Notas del primer dia de playoffs
El primer paso
Los Mellizos acaban de obtener una importantísima primera victoria frente a los Yankees. Como escribimos previamente este era un juego clave para Minnesota porque en el box estaba su mejor pitcher Johan Santana. El asunto es que Santana tuvo que salir por calambres en una pierna después del cuarto inning – casualmente su mejor entrada con solo siete pitcheos, pese al hit de Bernie Williams - y el verdadero héroe del juego fue el bullpen, encabezado por LaTroy Hawkins , cuyos lanzadores maniataron a los Yankees en cinco innings permitiendo solo una carrera.
Por supuesto, la jugada de Shannon Stewart en el batazo de Hideki Matsui cambió por completo la fisonomía del noveno inning ante un Eddie Guardado en un mal día, puesto que inmediatamente después vino el doble de Aaron Boone lo que habría significado un score 3-2 y el empate en posición de anotar.
Los Yankees estuvieron muy ineficientes ayer tarde dejando un total de diez corredores en circulación, algo muy poco característico de este oportunista equipo, sobre todo en post-temporada. Contra Santana embasaron cinco hombres en los primeros cuatro episodios, aunque es bueno señalar que el zurdo sacó siempre el importante primer out en todos los innings, y de hecho en los primeros tres no fue sino hasta después de dos outs que los Yankees embasaron corredores.
Crédito para Ron Gardenhire que tuvo el tino de sacar a sus relevistas en el momento preciso. En el quinto, cuando Rick Reed inesperadamente salió de ultratumba a lanzar gracias a la lesión de Santana (en esa situación yo pensaba que la primera opción era Eric Milton) , Gardenhire no vaciló en sustituirlo luego del doble de Soriano para no exponerlo a Nick Johnson con el empate en segunda y lo propio ocurrió en el séptimo cuando J.C. Romero transfirió al bateador zurdo Matsui abriendo el inning, rápidamente el dirigente trajo a Hawkins que luego de permitir un hit ponchó a Soriano y Johnson, este ultimo un tremendo turno de seis fouls y en el que Hawkins sacó la mejor parte.
Mencionamos lo de la defensa de New York ayer y precisamente en el juego hubo dos ó tres momentos en los que ese aspecto del juego no funcionó para los Yankees. Pero el mas negativo fue en el sexto cuando Bernie Williams no pudo alcanzar el batazo de Torii Hunter que se convirtió en triple y a seguidas Soriano cometio un error en tiro que permitio anotar a Hunter.
Williams tiene problemas en una rodilla y su alcance en el jardín central está limitado por esa circunstancia porque es casi imposible para él salir con un rápido primer paso detrás de un batazo. Reitero, la defensa en la línea central de los Yankees es mediocre, y muy probablemente ya le haya costado este primer juego. Los Yankees, aunque aun favoritos, están obligados a ganar mañana con Andy Pettite porque de lo contrario su situación se pondría calamitosa con dos partidos en el Metrodome debajo 0-2.
Aunque yo mencione el dato ayer en el analisis, y tambien en la radio, por lo cual hago un Mea Culpa, creo que Joe Sheehan en Baseball Prospectus tiene razon al señalar que el hecho de que los Yankees hayan barrido a los Mellizos este año (y el anterior) no es un dato que indique mucho sobre el curso de esta serie. El equipo de los Twins que jugó con los Yankees lo hizo en Abril, con un personal distinto al actual, y lo que es mas, con Joe Mays y Rick Reed, dos lanzadores cuya participación en esta serie sera exigua, lanzando en cuatro de esos partidos.
Joe tiene razón, solo citar el dato y convertirlo en significativo sin investigar el contexto de los hechos no es análisis, es vagancia.
Feria de bajos scores
Esto es lo que puede pintar la serie entre Marlins y Gigantes. Por razones de tiempo ya no tuve chance de analizar las series de la Nacional (y ya no lo haré por ser anticlimatico) pero una de las cosas que iba a señalar es que esta pudiera ser fácilmente una serie de juegos con muy baja anotacion. Si usted quita al gran Barry Bonds la ofensiva de los Gigantes es meramente ordinaria, y frente al pitcheo derecho (como Josh Beckett ayer) los Gigantes batearon .257/ .330/ .401 una notoria diferencia del .284/ .363/ .500 frente a zurdos.
De modo que, si usted camina a Barry tres veces y lo combina con un pitcher de poder derecho (como Beckett) en un parque de lanzadores como PacBell, el resultado es tres hits de los Gigantes y dos carreras, una de las cuales entró ayudada por un error en tiro. Claro, Bonds es posiblemente el unico pelotero del sistema solar capaz de decidir un juego sin hacer un swing y en el octavo inning la estrategia de transferirlo con dos outs y bases limpias para evitar un jonron, no le dio resultado a Jack McKeon.
Claro está, la historia de la tarde fue el excepcional pitcheo de Jason Schmidt quien no tuvo problemas con el lineup cargado de bateadores derechos de la Florida, permitiendo solo tres hits, cero bases por bolas y retirando a los ultimos catorce hombres. Los dos conejitos de los Marlins (Pierre y Castillo) no fueron factor en el juego fallando en ocho turnos entre ambos. Lo cual es muy malo para Florida porque la velocidad de estos dos hombres es fundamental para ellos tratar de ganar la serie aprovechando el hecho de que Benito Santiago apenas sacó el 18.5% de los corredores que se fueron a robo. Particularmente en los primeros dos juegos los Marlins tendrian esta ventaja, puesto que ya para el tercero el abridor es KirK Rueter, quien tiene buen viraje a las bases.
Para esta tarde yo creo que la formula Floridiana debe enfocarse en precisamente lograr embasas a Pierre y Castillo e intentar un juego de velocidad ante Sydney Ponson. Muy posiblemente con Brad Penny en la loma este sea otro juego de escaso store y los Marlins deben intentar “robarselo” de alguna manera para tener chance en la serie.
Con la ley en sus manos
El pronostico parece haber salido bien el primer día. Para esta hora ya usted habrá leído ó escuchado a los “expertos” decir 146,987 veces que los Cubs pueden ganar la serie a los Bravos (e incluso hasta la Serie Mundial) por su poderoso pitcheo abridor que puede ser capaz de provocarle un “apagón” a la más poderosa maquinaria ofensiva.
Bueno, exactamente eso pasó anoche en el primer juego.
Kerry Wood silenció los bates de la mejor ofensiva de la Liga Nacional, y de paso tomo la ley en sus manos ayudándose a si mismo con el batazo más importante del juego, un doble remolcador de dos carreras en el sexto inning, luego de que los Cubs llenaron las bases sin outs, solo para que Randall Simon se ponchara y Paul Bako “remolcara” una carrera con un roletazo por primera, que pudo haber sido un doble play si Robert Fick hubiera fildeado limpiamente el batazo (¿donde estará Keith Hernandez cuando lo necesitas?)
El lanzallamas Texano estuvo magnifico en la lomita permitiendo solo dos hits y ponchando a once, siendo el jonron de Marcus Giles en el tercero el único daño contra Wood.
Como era quizás de esperarse Russ Ortiz tuvo una salida inconsistente embasando once corredores en 5.2 innings, y únicamente la anémica ofensiva de los Cubs (aspecto que puede ser relevante en la serie) evitó que hiciera “explosión ruidosamente” como diría el gran Billy Berroa. Yo no entiendo mucho la decisión de Bobby Cox y Leo Mazzone de bajar a Greg Maddux hasta el tercer puesto de la rotación. Maddux no será ya el de antes, pero la realidad es que lanzó significativamente mejor ( 3.00 EFE vs. 4.29 de Ortiz) que Ortiz en la segunda mitad.
De modo que ¿A quien prefiere usted? ¿Al veterano ya en el ocaso pero aun efectivo y con cien años de experiencia en playoffs? O ¿Al ganador de 21 juegos con problemas cronicos de comando que en realidad no es tan buen pitcher como sus 21 victorias sugieren?
Yo pienso que la decisión es clara, a no ser que Cox, Mazzone y Maddux sepan algo que nosotros no sabemos. Lo complicado es que para hoy la opción es el inconsistente Mike Hampton, capaz de maniatar a los Cubs como de también explotar en menos de tres innings.
Una cosa común a estos dos equipos es que ambos bullpens son poco profundos y en el caso se los Cubs eso es motivo para tentar a Dusty Baker a trabajar más a sus abridores. De eso hablaremos en el futuro, pero no hay escena más preocupante que ver a un brazo joven (y en el caso de Wood, además operado) hacer 120 ó más lanzamientos en un juego. Wood fue el lanzador del béisbol con mas salidas de conteos de lanzamientos elevados (120+) y entre los lideres tambien está su compañero de equipo Mark Prior. Anoche, con una ventaja de tres carreras en el octavo y un Wood ya con más de cien pitcheos, uno pensó que era el chance de Baker de traer a Mike Remlinger o Kyle Farnsworth a lanzar el octavo; eso no pasó, Wood se metió en dificultades y su conteo de pitcheos se excedió posiblemente en diez ó quince.
Para llegar a la Serie Mundial un líder de rotación debe hacer un mínimo de tres a cuatro salidas y considerando la carga de trabajo que Baker colocó en sus abridores, la oportunidad de dar un poco de respiro a esos brazos debe ser aprovechada. Claro está, en playoffs se dirige distinto (no que Baker hubiera hecho lo correcto tampoco en la temporada regular) y las victorias si están a la mano hay que asegurarlas para evitar ser crucificado por prensa y fanaticos, pero esa clara “pequeña desconfianza” de Baker en su bullpen puede ser critica en las aspiraciones de Chicago.
Los Mellizos acaban de obtener una importantísima primera victoria frente a los Yankees. Como escribimos previamente este era un juego clave para Minnesota porque en el box estaba su mejor pitcher Johan Santana. El asunto es que Santana tuvo que salir por calambres en una pierna después del cuarto inning – casualmente su mejor entrada con solo siete pitcheos, pese al hit de Bernie Williams - y el verdadero héroe del juego fue el bullpen, encabezado por LaTroy Hawkins , cuyos lanzadores maniataron a los Yankees en cinco innings permitiendo solo una carrera.
Por supuesto, la jugada de Shannon Stewart en el batazo de Hideki Matsui cambió por completo la fisonomía del noveno inning ante un Eddie Guardado en un mal día, puesto que inmediatamente después vino el doble de Aaron Boone lo que habría significado un score 3-2 y el empate en posición de anotar.
Los Yankees estuvieron muy ineficientes ayer tarde dejando un total de diez corredores en circulación, algo muy poco característico de este oportunista equipo, sobre todo en post-temporada. Contra Santana embasaron cinco hombres en los primeros cuatro episodios, aunque es bueno señalar que el zurdo sacó siempre el importante primer out en todos los innings, y de hecho en los primeros tres no fue sino hasta después de dos outs que los Yankees embasaron corredores.
Crédito para Ron Gardenhire que tuvo el tino de sacar a sus relevistas en el momento preciso. En el quinto, cuando Rick Reed inesperadamente salió de ultratumba a lanzar gracias a la lesión de Santana (en esa situación yo pensaba que la primera opción era Eric Milton) , Gardenhire no vaciló en sustituirlo luego del doble de Soriano para no exponerlo a Nick Johnson con el empate en segunda y lo propio ocurrió en el séptimo cuando J.C. Romero transfirió al bateador zurdo Matsui abriendo el inning, rápidamente el dirigente trajo a Hawkins que luego de permitir un hit ponchó a Soriano y Johnson, este ultimo un tremendo turno de seis fouls y en el que Hawkins sacó la mejor parte.
Mencionamos lo de la defensa de New York ayer y precisamente en el juego hubo dos ó tres momentos en los que ese aspecto del juego no funcionó para los Yankees. Pero el mas negativo fue en el sexto cuando Bernie Williams no pudo alcanzar el batazo de Torii Hunter que se convirtió en triple y a seguidas Soriano cometio un error en tiro que permitio anotar a Hunter.
Williams tiene problemas en una rodilla y su alcance en el jardín central está limitado por esa circunstancia porque es casi imposible para él salir con un rápido primer paso detrás de un batazo. Reitero, la defensa en la línea central de los Yankees es mediocre, y muy probablemente ya le haya costado este primer juego. Los Yankees, aunque aun favoritos, están obligados a ganar mañana con Andy Pettite porque de lo contrario su situación se pondría calamitosa con dos partidos en el Metrodome debajo 0-2.
Aunque yo mencione el dato ayer en el analisis, y tambien en la radio, por lo cual hago un Mea Culpa, creo que Joe Sheehan en Baseball Prospectus tiene razon al señalar que el hecho de que los Yankees hayan barrido a los Mellizos este año (y el anterior) no es un dato que indique mucho sobre el curso de esta serie. El equipo de los Twins que jugó con los Yankees lo hizo en Abril, con un personal distinto al actual, y lo que es mas, con Joe Mays y Rick Reed, dos lanzadores cuya participación en esta serie sera exigua, lanzando en cuatro de esos partidos.
Joe tiene razón, solo citar el dato y convertirlo en significativo sin investigar el contexto de los hechos no es análisis, es vagancia.
Feria de bajos scores
Esto es lo que puede pintar la serie entre Marlins y Gigantes. Por razones de tiempo ya no tuve chance de analizar las series de la Nacional (y ya no lo haré por ser anticlimatico) pero una de las cosas que iba a señalar es que esta pudiera ser fácilmente una serie de juegos con muy baja anotacion. Si usted quita al gran Barry Bonds la ofensiva de los Gigantes es meramente ordinaria, y frente al pitcheo derecho (como Josh Beckett ayer) los Gigantes batearon .257/ .330/ .401 una notoria diferencia del .284/ .363/ .500 frente a zurdos.
De modo que, si usted camina a Barry tres veces y lo combina con un pitcher de poder derecho (como Beckett) en un parque de lanzadores como PacBell, el resultado es tres hits de los Gigantes y dos carreras, una de las cuales entró ayudada por un error en tiro. Claro, Bonds es posiblemente el unico pelotero del sistema solar capaz de decidir un juego sin hacer un swing y en el octavo inning la estrategia de transferirlo con dos outs y bases limpias para evitar un jonron, no le dio resultado a Jack McKeon.
Claro está, la historia de la tarde fue el excepcional pitcheo de Jason Schmidt quien no tuvo problemas con el lineup cargado de bateadores derechos de la Florida, permitiendo solo tres hits, cero bases por bolas y retirando a los ultimos catorce hombres. Los dos conejitos de los Marlins (Pierre y Castillo) no fueron factor en el juego fallando en ocho turnos entre ambos. Lo cual es muy malo para Florida porque la velocidad de estos dos hombres es fundamental para ellos tratar de ganar la serie aprovechando el hecho de que Benito Santiago apenas sacó el 18.5% de los corredores que se fueron a robo. Particularmente en los primeros dos juegos los Marlins tendrian esta ventaja, puesto que ya para el tercero el abridor es KirK Rueter, quien tiene buen viraje a las bases.
Para esta tarde yo creo que la formula Floridiana debe enfocarse en precisamente lograr embasas a Pierre y Castillo e intentar un juego de velocidad ante Sydney Ponson. Muy posiblemente con Brad Penny en la loma este sea otro juego de escaso store y los Marlins deben intentar “robarselo” de alguna manera para tener chance en la serie.
Con la ley en sus manos
El pronostico parece haber salido bien el primer día. Para esta hora ya usted habrá leído ó escuchado a los “expertos” decir 146,987 veces que los Cubs pueden ganar la serie a los Bravos (e incluso hasta la Serie Mundial) por su poderoso pitcheo abridor que puede ser capaz de provocarle un “apagón” a la más poderosa maquinaria ofensiva.
Bueno, exactamente eso pasó anoche en el primer juego.
Kerry Wood silenció los bates de la mejor ofensiva de la Liga Nacional, y de paso tomo la ley en sus manos ayudándose a si mismo con el batazo más importante del juego, un doble remolcador de dos carreras en el sexto inning, luego de que los Cubs llenaron las bases sin outs, solo para que Randall Simon se ponchara y Paul Bako “remolcara” una carrera con un roletazo por primera, que pudo haber sido un doble play si Robert Fick hubiera fildeado limpiamente el batazo (¿donde estará Keith Hernandez cuando lo necesitas?)
El lanzallamas Texano estuvo magnifico en la lomita permitiendo solo dos hits y ponchando a once, siendo el jonron de Marcus Giles en el tercero el único daño contra Wood.
Como era quizás de esperarse Russ Ortiz tuvo una salida inconsistente embasando once corredores en 5.2 innings, y únicamente la anémica ofensiva de los Cubs (aspecto que puede ser relevante en la serie) evitó que hiciera “explosión ruidosamente” como diría el gran Billy Berroa. Yo no entiendo mucho la decisión de Bobby Cox y Leo Mazzone de bajar a Greg Maddux hasta el tercer puesto de la rotación. Maddux no será ya el de antes, pero la realidad es que lanzó significativamente mejor ( 3.00 EFE vs. 4.29 de Ortiz) que Ortiz en la segunda mitad.
De modo que ¿A quien prefiere usted? ¿Al veterano ya en el ocaso pero aun efectivo y con cien años de experiencia en playoffs? O ¿Al ganador de 21 juegos con problemas cronicos de comando que en realidad no es tan buen pitcher como sus 21 victorias sugieren?
Yo pienso que la decisión es clara, a no ser que Cox, Mazzone y Maddux sepan algo que nosotros no sabemos. Lo complicado es que para hoy la opción es el inconsistente Mike Hampton, capaz de maniatar a los Cubs como de también explotar en menos de tres innings.
Una cosa común a estos dos equipos es que ambos bullpens son poco profundos y en el caso se los Cubs eso es motivo para tentar a Dusty Baker a trabajar más a sus abridores. De eso hablaremos en el futuro, pero no hay escena más preocupante que ver a un brazo joven (y en el caso de Wood, además operado) hacer 120 ó más lanzamientos en un juego. Wood fue el lanzador del béisbol con mas salidas de conteos de lanzamientos elevados (120+) y entre los lideres tambien está su compañero de equipo Mark Prior. Anoche, con una ventaja de tres carreras en el octavo y un Wood ya con más de cien pitcheos, uno pensó que era el chance de Baker de traer a Mike Remlinger o Kyle Farnsworth a lanzar el octavo; eso no pasó, Wood se metió en dificultades y su conteo de pitcheos se excedió posiblemente en diez ó quince.
Para llegar a la Serie Mundial un líder de rotación debe hacer un mínimo de tres a cuatro salidas y considerando la carga de trabajo que Baker colocó en sus abridores, la oportunidad de dar un poco de respiro a esos brazos debe ser aprovechada. Claro está, en playoffs se dirige distinto (no que Baker hubiera hecho lo correcto tampoco en la temporada regular) y las victorias si están a la mano hay que asegurarlas para evitar ser crucificado por prensa y fanaticos, pero esa clara “pequeña desconfianza” de Baker en su bullpen puede ser critica en las aspiraciones de Chicago.
Tuesday, September 30, 2003
Series de División
| Equipo | Anotadas | Permitidas | PIT% | EqA | DER |
|---|---|---|---|---|---|
| OAK | 768 | 643 | .588 | .254 | .7263 |
| BOS | 961 | 809 | .586 | .287 | .7005 |
Medias Rojas vs. Atléticos
Esta es la serie más dolorosa y difícil para aquellos que como un servidor, fueron bañados en las aguas bautismales del análisis científico en el béisbol (popularmente conocido como Sabermetrics) - en mi caso recibí la palabra en 1995 - ¿Por qué dolorosa? Simple, dos de las organizaciones más abiertas a poner en practica las teorías que van desde Branch Rickey hasta Bill James, se enfrentan en esta primera serie de playoff, con la lamentable realidad de que no es posible un empate.
Esta es una serie de contrastes en el papel. Boston tiene el mejor equipo ofensivo del béisbol (.287 Average Equivalente, 5.94 Carreras por juego), Oakland, a diferencia de otros años, uno mediocre (.254 EqA, 4.74 CpJ). Por otro lado, los Atléticos tienen el mejor pitcheo de la Liga Americana (3.97 Carreras permitidas por juego) con una gran rotación – aunque sin Mark Mulder – y un igualmente efectivo bullpen. Los Medias Rojas encabezaron la liga en casi todo departamento ofensivo de importancia, y los Atléticos hicieron lo propio en el pitcheo. De modo que todo aquel que se crea el cliché de que “El buen pitcheo siempre derrota al buen bateo” me imagino que estará poniendo todos sus huevos en la canasta de los Elefantes Blancos.
Bueno, no exactamente. Esta parece ser la serie más pareja de todas. Tomando en cuenta el contexto, el gran pitcheo de Oakland ha sido el beneficiario de jugar la mitad de sus juegos en el Coliseo de Oakland, que es uno de los mejores estadios para lanzadores de las mayores, mientras los Medias Rojas se aprovechan de un parque que aumenta la ofensiva como el Fenway Park. Boston, de hecho, colectivamente fue significativamente mejor en su casa (.316/ .392/ .527/ 6.56 CpJ) que en la ruta (.263/ .328/ .456/ 5.29 CpJ), lo cual quiere decir que de “Grandiosa”, la ofensiva pasa a ser “Solo Buena”.
Los Atléticos colocaran sus dos mejores abridores, Tim Hudson y Barry Zito, en los primeros dos juegos. Siendo los partidos en Oakland (en donde tuvieron marca de 57-24) los locales aparentan estar en ventaja – salvo un pequeño factor – Pedro Martínez. Pedro es el mejor pitcher del béisbol, y en sus ultimas salidas el Dominicano lanzó seis, ocho, nueve y siete entradas, hasta su salida de mantenimiento de tres innings ante Tampa el viernes. En total, Martínez ha permitido tres carreras limpias en sus ultimas 33 entradas (0.82 ERA) y 37 ponches.
De modo que, mañana en la noche Oakland no parece tener una gran ventaja por jugar en su casa.
Para la segunda fecha el match es Tim Wakefield contra Barry Zito, moviendose Derek Lowe al primer partido en Fenway Park. Lowe lanzó mucho mejor en Fenway (3.21 ERA en 115 Innings) que en la ruta (6.11 ERA en 88.1 Innings) y puesto que la ofensiva de los Medias Rojas es prácticamente indetenible en su casa como ya vimos, eso podría ser problemático para los Atléticos que van con sus dos abridores menos efectivos, Ted Lilly y Richard James Harden en la jaula de los leones. Lilly estuvo fantástico en sus ultimas salidas y Harden es uno de los principales prospectos de pitcheo del béisbol, pero estamos hablando de un equipo que promedia seis carreras y media por juego en su casa. Esa es una piedra difícil en el camino de Oakland.
Ninguna discusión que gire alrededor de los Medias Rojas puede dejar fuera a su tormentoso bullpen, talón de Aquiles del equipo durante toda la temporada regular. Sin dudas los Atléticos tienen una ventaja que aparenta ser considerable en este aspecto. De acuerdo a la herramienta de evaluación de relevistas de Michael Wolverton en Baseball Prospectus, el de Oakland fue el tercer mejor bullpen de la Liga Americana (41.4 Carreras Prevenidas Ajustadas) mientras el de Boston fue el tercer peor de la liga (- 27.1 CPA).
He comentado esto en mis intervenciones de radio, y me arriesgare a dejarlo por escrito aquí también, yo creo que el bullpen de Boston va a mejorar significativamente en la post-temporada. Yo no digo que va a ser un punto fuerte, pero no creo que sea tan inconsistente como hemos visto hasta ahora.
Si Boston logra salir dividiendo de Oakland sus oportunidades de ganar la serie se maximizan, porque irán a Fenway contra la “parte trasera” de la rotación, y entonces en un eventual quinto y decisivo juego es Pedro con descanso completo y en la ruta, donde tuvo efectividad de 1.57 en la temporada.
Desde el año 2000 he estado apoyando y siguiendo a los Atléticos con la esperanza de que por lo menos puedan ganar un pennant, para que se termine la tontería apoyada por el comisionado Bud Selig, de que los equipos que no tienen cien millones de nomina y un estadio nuevo pagado por los contribuyentes no pueden ser ganadores. Los Atléticos han ganado la mayor cantidad de juegos en el béisbol los últimos tres años apoyados por la mejor gerencia del béisbol y una nomina de mercado pequeño. Que hayan sido victimas de la mala suerte en sus tres series de división anterior en poco refleja las aptitudes del equipo, el resultado de una serie corta es fortuito, y en la mayoría de los casos impredecible. Esta vez yo no voy a estar apoyando abiertamente los Atléticos, como les dije, es una serie dolorosa por eso, los dos equipos que yo hubiera querido no se enfrentaran en esta primera ronda tendrán que hacerlo, y me parece que Boston tiene chance de avanzar hasta un posible “Duelo al Amanecer” contra el Imperio del Mal.
Boston en el máximo
Twins Vs. Yankees
| Equipo | Anotadas | Permitidas | PIT% | EqA | DER |
|---|---|---|---|---|---|
| NYY | 877 | 716 | .600 | .280 | .6977 |
| MIN | 801 | 758 | .531 | .262 | .7106 |
Siendo honestos, esta es una serie que en el papel no luce ser muy pareja. Los Yankees barrieron su serie este año ante los Mellizos (7 juegos), y también su serie del año pasado (6 juegos), lo que quiere decir que los Yankees le han ganado trece juegos en forma consecutiva a Minnesota. Para ser exactos, la ultima vez que los Yankees perdieron un juego ante sus rivales de esta primera ronda, fue el 10 de mayo del 2001.
Es bueno al analizar esta serie hacer un poco de referencia a la serie del año pasado entre los Angelinos y los Yankees. Como es de todos recordado los eventuales campeones de la Serie Mundial aplastaron a los Yankees en cuatro juegos por la sencilla razón de que los Newyorkinos, con toda su aura de super-poderosos, no hacían buen match con los Serafines.
¿Las razones? Simples, Los Yankees presentaban la peor defensa de los ocho equipos en los playoffs de acuerdo al rating de eficiencia defensiva (DER) que no es mas que el porcentaje de batazos en juego que son convertidos en outs por la defensa. Esa pobre defensa ante un equipo como los Angelinos, cuya ofensiva dependía básicamente de hacer contacto, poner la pelota en juego y sobre todo poncharse poco, explotó esa debilidad de los Yankees al máximo.
La pregunta es si esos mismos factores se repiten este año. Sí, en parte. Los Yankees otra vez tienen la peor defensa de todos los equipos en los playoffs (de hecho, la peor del béisbol a excepción de Baltimore, Texas y Colorado) convirtiendo, como se ve en la tabla, solo un 68% de los batazos en juego en outs. Eso es buena noticia para los Twins puesto que su ofensiva consiste precisamente de bateadores que hacen muchos swings y colocan la pelota en juego. La diferencia fundamental es que Minnesota se poncha significativamente mas que los Angelinos del 2002 – 1,027 contra 805 – casi 1.4 ponches por cada nueve entradas. Esas son buenas noticias para Roger Clemens y compartes. De manera que las similitudes entre ambas ofensivas difieren en un aspecto fundamental, mas ponches significa menos pelotas en juego, y menos oportunidades para que Derek Jeter haga galas de sus limitadas habilidades defensivas (la oración anterior no fue un error de sus ojos, Jeter es un jugador defensivo mediocre) por lo tanto es improbable que los Twins vapuleen con una lluvia de sencillos, dobles y triples a los Yankees en la serie.
Quiere decir entonces que los Mellizos tendrán que buscar otras alternativas para derrotar al Imperio del Mal... um, perdón, los Mulos del Bronx. El primer juego es crucial para Minnesota porque van con su mejor lanzador, Johan Santana. Dado que esta es una serie con un día de descanso luego del primer juego, el abridor del primer juego estaría hábil para tirar el cuarto con descanso completo (o sea Santana de nuevo, pero en el Metrodome) lo cual podría estar a favor de los Mellizos. Naturalmente, esto suena mucho mejor de lo que seria la realidad. El rival de Santana es Mike Mussina quien tiene marca de 20 y 2 de por vida ante los Twins, incluyendo 2-0-1.20 este año.
New York además con el excelente manejo de la zona de strike de un buen numero de sus jugadores, puede dar problemas a Santana, cuya principal falla como lanzador es precisamente la tendencia a perder el comando en ocasiones del juego.
En el segundo juego Brad Radke tirará contra Andy Pettite. Radke lanzó gran pelota en la segunda mitad de la temporada, igual que Pettite. El problema de Minnesota es que su diferencia de platoon ante pitcheo zurdo es significativa (.286 /.349 / .440 vs. PD y .255 / .323/ .406 vs. PZ) de modo que los Yankees deberían considerar incluso la posibilidad de incluir a David Wells en la rotación, cosa que no está en los planes originales.
El tercer match es Roger Clemens y Kyle Lohse en el Metrodome, en donde no hay que ser muy inteligente para dar la ventaja a los Yankees. No estaría de más que Gardenhire ponderara el iniciar este juego con el veterano zurdo Kenny Rogers, puesto que los Yankees son ligeramente menos efectivos frente a zurdos.
Estadísticamente el bullpen de los Mellizos fue significativamente mejor que el de los Yankees. LaTroy Hawkins, Eddie Guardado, Juan Rincon y Mike Fetters estaran viendo el grueso de la accion en las ultimas tres entradas. En el caso de los Yankees este año el bullpen fue mucho menos efectivo que en años anteriores. Ellos aun tienen a Mariano Rivera, y es de esperar que Jeff Nelson, Chris Hammond, Felix Heredia y Gabe White pasen la bola al panameño.
Los Yankees son los favoritos, como es lógico, probablemente para ganar en cuatro. El escenario para una victoria de Minnesota en similar al del año pasado con Anaheim. Si los Mellizos logran poncharse menos en la serie le podrán sacar ventaja a la mayor debilidad de New York que es la defensa. Otra cosa que debe evitar a toda costa Minnesota es el jonron, especialmente con Radke y Lohse. El pitcheo de Minnesota permitió 42 jonrones más que el de los Yankees, de modo que mientras menos jonrones se conecten en la serie, mucho mejor para los Mellizos.
A mi juicio los Mellizos para aspirar a ganar necesitan ganar un juego en New York (preferiblemente el primero) para de esa forma asegurar dos en el Metrodome, lo cual podría ser importantísimo, sobre todo con Johan Santana en un cuarto juego.
Yankees en cuatro (aunque yo estaría muy feliz si no es así)
Monday, September 29, 2003
Se cierra el telón
Ositos
Los Cubs finalmente ganaron la división central de la Liga Nacional para la alegría de su fiel y sufrida fanaticada, y también la tranquilidad de varios amigos que desde hace tres semanas me preguntan todos los días mi opinión acerca de las oportunidades de los Cubs. Por alguna razón yo estaba convencido que al final los Astros harían algo para perder. Houston no aprovecho su oportunidad de despegarse cuando los Cubs cayeron en un hoyo a finales de agosto en donde perdieron nueve de catorce juegos y en donde absolutamente nadie produjo ofensivamente. Al llegar el ultimo fin de semana estuve comentando en el programa de radio “Lucky Seven en el Aire” que presentía que Houston tendría problemas con Milwaukee porque Jeriome Robertson y Ron Villone no son precisamente confiables (los pitchers de Milwaukee tampoco, pero ellos no tenían la presión de ganar un titulo encima), y ¡PRESTO!, Los Astros jugaron uno de sus peores juegos del año el viernes y cuesta abajo en la rodada se fueron sus aspiraciones.
¿Por qué no ganaron los Astros? La ausencia de Roy Oswalt fue critica. El mejor lanzador del equipo perdió al menos diez salidas por una recurrente lesión en la ingle, y eso debilitó aun más al staff de abridores.
Es interesante que los Cubs hayan ganado porque eso le da un poco de más atractivo a la post temporada, no solo para los Dominicanos como yo, sino para los fanáticos del béisbol en general. Wrigley Field, Sammy Sosa, Mark Prior, Kerry Wood, noventa y cinco años de fatalidad, etc., etc. El menú es bien completo.
He criticado a la organización de Chicago varias veces este año. Por ejemplo, su esquema / complot de revenderse ellos mismos los boletos a una empresa fantasma y dispararle el precio, es deleznable. Luego está Dusty Baker y su alergia patológica a los jugadores jóvenes, pero, no se puede argumentar en contra de los resultados, los Cubs tenían una ventana de oportunidad, la aprovecharon, y como dicen: los banderines ondean para toda la vida.
A propósito de Baker, la idea de que el debe ser el manager del año me parece pretenciosa. Seguro, los Cubs apestaron el año pasado y todo eso, pero a mi juicio Baker no maximizó el talento que tenia a mano en principio - hizo menos con mas - y su mano maestra esta detrás de las adquisiciones sin sentido de Tony Womack, Randall Simon y Doug Glanville, eso sin hablar de sus conocidas debilidades tácticas. El hombre ganó, siempre ha ganado, y en parte no se le ha reconocido su éxito, pero este año su trabajo no está a la par con el de Jack McKeon, Felipe Alou ó Bobby Cox.
Ron Santo
Continuando con los Cubs, ayer domingo se produjo la ceremonia de retiro del uniforme numero “10” del gran tercera base Ron Santo. Como muchos saben a Santo le ha sido negado su ingreso a Cooperstown repetidamente pese a ser uno de los candidatos elegibles mas calificados. De esto escribire algo en el futuro, pero es increíble que uno de los cinco ó seis mejores jugadores de su posicion de la historia no tenga una placa en el Salón de la Fama. Lo cual, por cierto, me hace preguntar ¿Por qué diablos esperaron tanto los Cubs para honrar a su antiguo heroe y actual comentarista de radio?
Ron Santo pertenece a Cooperstown.
Juan Cruz
El día inaugural de la temporada Juan Cruz ponchó a seis bateadores de los Mets en dos entradas, permitiendo apenas un hit. En su próxima salida ante Cincinnati Cruz perdió el juego, pero ponchó a tres en tres innings, y la carrera con la que perdió fue un cuadrangular de Austin Kearns. Aparte de eso Cruz lució casi tan dominante como ante los Mets, y yo estaba convencido de que Cruz se encaminaba a unas semanas de establecimiento en el rol de relevo largo, para luego irremediablemente sustituir en la rotacion al desastre que seguro iba a ser Shawn Estes.
Bueno, eso no pasó. Las próximas tres salidas de Cruz fueron malas iniciando un periodo de inconsistencia que provocó su envió a AAA, en donde estuvo dominante (4-0-1.95 en 50 innings). Ayer, en el ultimo día de la temporada, y posiblemente buscando un puesto en el roster de post-temporada, Juan permitió un jonron a Jack Wilson - único hit que permitió – dando señales de la misma inconsistencia que puede obligar a Dusty Baker a dejarlo fuera de roster.
En fin, eso puede que sean buenas noticias para los que siguen al Licey.
Adecuado
Junto con el cierre del Veterans Stadium en Philadelphia parece que los Phillies han cerrado su relación de una temporada con el lanzador Kevin Millwood. El botín cortesía de John Schuerholz, que ante la opinión de muchos (servidor incluido) catapultaría a los Phillies por encima de los Bravos, permitió once hits y cinco carreras en cuatro entradas, y luego de ser sustituido arrojó al publico su guante y su gorra en un claro gesto de “por fin me voy de este lugar”.
Millwood no resultó ser el as de rotación que esperábamos, y su punto mas alto fue el no-hitter ante los Gigantes el 27 de abril. En la segunda mitad Millwood no lanzó igual (4-5-4.28) y en septiembre, en el momento que los Phillies más necesitaban de su ayuda, Millwood desapareció (1-2-5.29 en seis aperturas) sin dejar rastro.
El fin no pudo ser mas adecuado, Millwood fue vapuleado por su antiguo equipo - los Bravos – precisamente el equipo que los Phillies destronarían con su ayuda.
Tigres
Los Tigres de Detroit desperdiciaron su gran oportunidad de que los recordaran de aquí a cincuenta años cuando se les ocurrió jugar algo que se asemejara a buen béisbol la ultima semana. Los Tigres ganaron cinco de los últimos seis juegos para evitar las 120 derrotas y romper el record de los Amazin’ Mets de Casey Stengel.
Que mal, porque era el único chance, repito, que alguien los recordara en el futuro. Así como no es lo mismo batear .299 que .300, no es lo mismo perder 119 que 120.
Los Cubs finalmente ganaron la división central de la Liga Nacional para la alegría de su fiel y sufrida fanaticada, y también la tranquilidad de varios amigos que desde hace tres semanas me preguntan todos los días mi opinión acerca de las oportunidades de los Cubs. Por alguna razón yo estaba convencido que al final los Astros harían algo para perder. Houston no aprovecho su oportunidad de despegarse cuando los Cubs cayeron en un hoyo a finales de agosto en donde perdieron nueve de catorce juegos y en donde absolutamente nadie produjo ofensivamente. Al llegar el ultimo fin de semana estuve comentando en el programa de radio “Lucky Seven en el Aire” que presentía que Houston tendría problemas con Milwaukee porque Jeriome Robertson y Ron Villone no son precisamente confiables (los pitchers de Milwaukee tampoco, pero ellos no tenían la presión de ganar un titulo encima), y ¡PRESTO!, Los Astros jugaron uno de sus peores juegos del año el viernes y cuesta abajo en la rodada se fueron sus aspiraciones.
¿Por qué no ganaron los Astros? La ausencia de Roy Oswalt fue critica. El mejor lanzador del equipo perdió al menos diez salidas por una recurrente lesión en la ingle, y eso debilitó aun más al staff de abridores.
Es interesante que los Cubs hayan ganado porque eso le da un poco de más atractivo a la post temporada, no solo para los Dominicanos como yo, sino para los fanáticos del béisbol en general. Wrigley Field, Sammy Sosa, Mark Prior, Kerry Wood, noventa y cinco años de fatalidad, etc., etc. El menú es bien completo.
He criticado a la organización de Chicago varias veces este año. Por ejemplo, su esquema / complot de revenderse ellos mismos los boletos a una empresa fantasma y dispararle el precio, es deleznable. Luego está Dusty Baker y su alergia patológica a los jugadores jóvenes, pero, no se puede argumentar en contra de los resultados, los Cubs tenían una ventana de oportunidad, la aprovecharon, y como dicen: los banderines ondean para toda la vida.
A propósito de Baker, la idea de que el debe ser el manager del año me parece pretenciosa. Seguro, los Cubs apestaron el año pasado y todo eso, pero a mi juicio Baker no maximizó el talento que tenia a mano en principio - hizo menos con mas - y su mano maestra esta detrás de las adquisiciones sin sentido de Tony Womack, Randall Simon y Doug Glanville, eso sin hablar de sus conocidas debilidades tácticas. El hombre ganó, siempre ha ganado, y en parte no se le ha reconocido su éxito, pero este año su trabajo no está a la par con el de Jack McKeon, Felipe Alou ó Bobby Cox.
Ron Santo
Continuando con los Cubs, ayer domingo se produjo la ceremonia de retiro del uniforme numero “10” del gran tercera base Ron Santo. Como muchos saben a Santo le ha sido negado su ingreso a Cooperstown repetidamente pese a ser uno de los candidatos elegibles mas calificados. De esto escribire algo en el futuro, pero es increíble que uno de los cinco ó seis mejores jugadores de su posicion de la historia no tenga una placa en el Salón de la Fama. Lo cual, por cierto, me hace preguntar ¿Por qué diablos esperaron tanto los Cubs para honrar a su antiguo heroe y actual comentarista de radio?
Ron Santo pertenece a Cooperstown.
Juan Cruz
El día inaugural de la temporada Juan Cruz ponchó a seis bateadores de los Mets en dos entradas, permitiendo apenas un hit. En su próxima salida ante Cincinnati Cruz perdió el juego, pero ponchó a tres en tres innings, y la carrera con la que perdió fue un cuadrangular de Austin Kearns. Aparte de eso Cruz lució casi tan dominante como ante los Mets, y yo estaba convencido de que Cruz se encaminaba a unas semanas de establecimiento en el rol de relevo largo, para luego irremediablemente sustituir en la rotacion al desastre que seguro iba a ser Shawn Estes.
Bueno, eso no pasó. Las próximas tres salidas de Cruz fueron malas iniciando un periodo de inconsistencia que provocó su envió a AAA, en donde estuvo dominante (4-0-1.95 en 50 innings). Ayer, en el ultimo día de la temporada, y posiblemente buscando un puesto en el roster de post-temporada, Juan permitió un jonron a Jack Wilson - único hit que permitió – dando señales de la misma inconsistencia que puede obligar a Dusty Baker a dejarlo fuera de roster.
En fin, eso puede que sean buenas noticias para los que siguen al Licey.
Adecuado
Junto con el cierre del Veterans Stadium en Philadelphia parece que los Phillies han cerrado su relación de una temporada con el lanzador Kevin Millwood. El botín cortesía de John Schuerholz, que ante la opinión de muchos (servidor incluido) catapultaría a los Phillies por encima de los Bravos, permitió once hits y cinco carreras en cuatro entradas, y luego de ser sustituido arrojó al publico su guante y su gorra en un claro gesto de “por fin me voy de este lugar”.
Millwood no resultó ser el as de rotación que esperábamos, y su punto mas alto fue el no-hitter ante los Gigantes el 27 de abril. En la segunda mitad Millwood no lanzó igual (4-5-4.28) y en septiembre, en el momento que los Phillies más necesitaban de su ayuda, Millwood desapareció (1-2-5.29 en seis aperturas) sin dejar rastro.
El fin no pudo ser mas adecuado, Millwood fue vapuleado por su antiguo equipo - los Bravos – precisamente el equipo que los Phillies destronarían con su ayuda.
Tigres
Los Tigres de Detroit desperdiciaron su gran oportunidad de que los recordaran de aquí a cincuenta años cuando se les ocurrió jugar algo que se asemejara a buen béisbol la ultima semana. Los Tigres ganaron cinco de los últimos seis juegos para evitar las 120 derrotas y romper el record de los Amazin’ Mets de Casey Stengel.
Que mal, porque era el único chance, repito, que alguien los recordara en el futuro. Así como no es lo mismo batear .299 que .300, no es lo mismo perder 119 que 120.
